Hemos ganado. Una final no importa cómo siempre que se gane, y eso es lo que cuenta.
Pero ojo, tela marinera la lectura del partido de Don Carlo.
Con Kroos y Casemiro anclados atrás, ralentizando el juego y la salida, empujando al equipo hacia atrás, erráticos en la salida. El Liverpool nos hicimos mucho daño y no supo corregir.
El partido pedía dos cambios claros ya en el minuto 20, pero al menos en el 50, que eran Camavinga por Casemiro y Rodrygo por Kroos para pasar a Valverde al centro.
No sólo no los hizo, es que además los hizo en el minuto 80, y vaya cambios. Si el Liverpool llega a provocar la prórroga, llegamos sin Modric, Valverde y Vinicius