Súmale la tarjeta a Xabi Alonso con 0-3 en el Olímpico que le hace perderse la final de la Champions (razón por la que hubo que acudir a la épica en el 93), o la caraja con la que sale su equipo tras el descanso para dejarse remontar un 3-0 en 15 minutos en una final de Champions, aunque eso no lo padecimos nosotros. También me acuerdo de una eliminatoria de Copa en Bilbao donde puso a jugar a todos los brasileños que habían llegado fundidos de Brasil 24 horas antes. A la pvta calle dando una imagen dantesca.
Por no hablar de la titularidad de Topor durante la temporada 2014-2015 que nos costó la final de Champions y la Liga con 43 goles encajados en 42 partidos, cuando Keylor era 10 veces más portero que Casillas.
Pero bueno, todo buen escribano echa un borrón, dirán algunos.