Agent_Graves escribió:Apostata escribió:Isco por detras de los delanteros es un rombito, y el rombito es el sistema más escualido que existe en las ayudas defensivas por banda.
Un rombito es darle las bandas enteras a los laterales para que ataquen y para que defiendan. Autopistas perfectas para Alaba-Ribery contra Carvajal y Lahm-Robben contra Marcelo.
Con el rombito, a los tres medios les vuelve a quedar una anchura de campo insensata, las ayudas y las coberturas a los laterales por parte de Kroos y de Modric van a llegar mal y tarde, y a costa de desplobar el eje de la media en los desplazamientos. Se van a hinchar a hacer dos contra uno en banda.
Somos muy incoherentes. Nos hemos quejado durante años de que el 4-3-3 era un sistema insuficiente en la presión, y cuando por fin Zidane se decide a retrasar a uno de los extremos y a adoptar un 4-4-2, resulta que volvemos a pedir una media de tres, sin bandas, y en la que sustituimos la insuficiente basculación de uno de los extremos por la basculación de un media punta que, en el mejor de los casos, hará algo de presión por el centro, mientras las bandas se convierten en auténticas pistas de aeropuerto para los rivales.
Real Madrid - Bayern de hace 3 años. 1-0 Mira quién estuvo ayudando a Marcelo a tapar a Robben, en su plenitud.
¿Tú pretendes que poner a Isco de enganche será una buena medida para ayudar a Marcelo contra Robben+Lamm?
¿Y esto como va, es Isco el que se va a teletransportar desde la zona de enganche al lateral zurdo o le dejamos a Kovacic que cubra todo el ala izquierda de Casemiro, desde el eje hasta la cal? Y ya de paso, que doble también a Marcelo para que podamos entrar por banda.
Y claro, como el campo tiene dos bandas, ¿que hacemos con la otra? ¿támbién va a ser Isco el que haga un "triángulo mágico", enganche-banda derecha-banda izquierda, o le damos a Modric otros 50 metros de ancho, como a Kroos?
La cuadrstura del círculo, justificada por un partido de hace cuatro años en el que "dizque" algo parecido a un rombo frenó al mejor Robben ¡Un rombo con Angelote, mamma mía!