Carlsen -Caruana: Match campeonato del mundo de ajedrez

Categoría para hablar de todos los deportes menos sobre fútbol.
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Capa
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#61Mensaje

Apostata escribió:
Capa escribió:Confirmo que el ajedrez puede llegar a ser obsesivo.
Desde fuera es un juego aburridísimo , desde dentro y una vez que lo entiendes es puro vicio. Te picas demasiado .Cauando ganas quieres seguir jugando y cuando pierdes para no quedarte con ese sinsabor siempre quieres jugar ' otra más ' es un bucle casi infinito.

No exagero si digo que he jugado más de 500.000 partidas a 1 min.

Cuando juego en equipo en la liga soy propenso a llevarme broncas de mis compañeros por jugar casi al toque .
Y es que yo soy de los que cree que si uno no ve una jugada a primera vista para que va a perder el tiempo pensando si tampoco la va a encontrar en el 99% de los casos ?
Son gastos de energía innecesarios.

Mi capacidad para estar concentrado en algo y no pensar en otras cosas es ridículamente baja.
Hombre, Capa, el golpe de vista es esencial en el ajedrez, pero no me jodas, para buscar la profundidad de la jugada necesitas tiempo y serenidad.

Las máquinas nos ganan precisamente porque no usan la intuición sino la profundidad. Ellas procesan tan rápido que pueden calcular infinidad de líneas, incluyendo las que nosotros desestimamos por absurdas.

La intuición en el ajedrez es una idea romántica, el mito de que un cerebro avezado capta de un golpe y de manera inconsciente lo que la lógica es incapaz de desarrollar. Pero eso es incierto, el ajedrez es un juego 100% lógico, y si la intuición supera a la lógica, es porque la lógica no se usa correctamente.
Por eso mismo no tengo más nivel ( que tampoco sería mucho más )
No profundizo y apenas calculo nada.
Me baso en posiciones conocidas , en la intuición y en el azar. Y sobre todo en el caos. Cuanto más caótica sea la posición más provecho saco de ella.

Si no llevo la iniciativa me encuentro muy incómodo y no ofrezco tablas jamás . No va conmigo

Está claro que nací en una época equivocada donde los tochos teóricos y las sutilezas de las posiciones han apabullado al ajedrez romántico.

Las máquinas han influenciado demasiado , A día de hoy cualquier móvil destrozaría a Carlsen tranquilamente.
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Apostata
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#62Mensaje

Es cierto, los ordenadores se han cargado la idea romántica del ajedrez. Hagas lo que hagas contra ellos, estás equivocado.
comunero
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#63Mensaje

No va a ser fácil. A ver, que levanten la mano los que sean partidarios de crear una sección de ajedrez.

Era de esperar. Gracias, mamá, ya puedes bajar el brazo. La verdad es que me imaginaba que la propuesta no iba a ser recibida con gritos de entusiasmo, precisamente. Pero déjenme que les explique. Pónganse cómodos.

Desde hace muchos años, el Real Madrid es un club con sólo dos secciones: la de fútbol y la de baloncesto. Pero eso es algo circunstancial: ni siempre fue así ni tiene por qué seguir siendo así en el futuro; cuando Manolo Santana ganó el torneo de Wimbledon en 1966, vestía una camiseta del Real Madrid, y ese trofeo luce en nuestras vitrinas como prueba de que en una época tuvimos una sección de tenis, de la que, por supuesto, formaba parte el mejor jugador español (y digo sólo el mejor de los españoles, porque en los años sesenta no era realista pensar en tener a Rod Laver en nuestras filas).

De hecho, son docenas las modalidades deportivas que han tenido su hueco en el Real Madrid, entre ellas algunas tan entrañables o exóticas como la petanca, el remo, la pelota, el boxeo y la esgrima.

Si están ustedes pensando que aquello no pasaría de ser un detalle folclórico, unos meros coros y danzas, o adornos florales para lucir en los desfiles, permitan que les diga que se equivocan de medio a medio: junto al mencionado trofeo de Wimbledon que ganara Santana para el Real Madrid en 1966, podemos presumir de varios campeonatos de España en disciplinas tan variadas como el béisbol, la pelota (en pala y en cesta punta), el balonmano, la halterofilia y la lucha grecorromana, así como de dos campeonatos de Europa de boxeo (¿les suena Fred Galiana?), un récord nacional de lanzamiento de disco (del polifacético Miguel de la Quadra Salcedo) y uno del mundo de 1500 metros (gracias a José Luis González). No sigo, para no aburrir con datos. Pero queda claro que no se trataba de comparsas. Alberto Cosín escribió hace tiempo un magnífico artículo, un alarde de erudición, cuya lectura recomiendo. El que está usted leyendo en estos momentos va enfocado a una disciplina casi marginal y algo exótica.

Y el ajedrez, ¿qué? Otra vez campeones de Europa, ¿no? Pues no, campeones de Europa no hemos sido nunca, por la sencilla razón de que los españoles no hemos pintado (casi) nada desde los tiempos de Lucena y Ruy López, pero dentro de nuestras limitaciones, el Real Madrid ha mantenido una división de ajedrez en la que han militado los primeros espadas del país, encabezados por el legendario Arturo Pomar, acaso el único ajedrecista español al que se pueda calificar verdaderamente de popular. Junto a él, hemos contado con notables jugadores, entre los que no puedo dejar de nombrar a José Sanz Aguado, que dejó para la historia una partida (Ortueta – Sanz, 1933) con un extraordinario remate. Con Pomar, Sanz y otros deportistas conquistamos varios campeonatos nacionales, tanto en individual como por equipos.



La sección de ajedrez del Real Madrid se clausuró hace muchos años, y seguramente nadie la echa de menos. Pero yo me atrevo a lanzar la sugerencia, puede que temeraria, de volver a abrirla, ahora que se dan varias circunstancias favorables (entre otras, el asunto del fútbol femenino) . Con la venia:

La división de ajedrez facilitaría la penetración de la marca “Real Madrid” en tres mercados enormes y poco explotados por nuestro club: el ruso, el chino y el indio. Rusia es la gran potencia histórica, donde la popularidad del ajedrez es inmensa; el Real Madrid podría potenciar su imagen incorporando al equipo a jugadores como Karjakin (que fue aspirante al título mundial), o los jóvenes Artemiev y Fedoseev. China es el futuro (que ya está aquí); seguramente el próximo campeón del mundo será un chino; Ding Liren y Wang Hao serían unos fichajes magníficos, el jovencísimo Wei Yi podría ser el Vinicius del ajedrez. La India, además de tener una gran tradición, es la patria del anterior poseedor del título, Vishy Anand; traerlo a Madrid a que dejara aquí sus últimas gotas de talento sería un acierto indudable, y no debe de resultar muy difícil, puesto que vivió bastantes años en Collado Mediano, cerca de Madrid.
Nuestra principal baza es el actual campeón mundial de ajedrez, el noruego Magnus Carlsen (¡qué nombre tan madridista!), declarado seguidor de nuestro club. Con motivo de su vigésimo tercer cumpleaños realizó el saque de honor en el partido Real Madrid – Valladolid de liga, y se le veía entusiasmado. No creo que costara convencerlo para que fichara por un equipo de ajedrez llamado Real Madrid. Sin duda, sería el Alfredo Di Stéfano de la sección.
En ajedrez no hay razón para distinguir entre hombres y mujeres, lo que nos ofrece una ocasión pintiparada para romper moldes. Ni sección femenina ni gaitas. Yo incluiría en el equipo, junto a los varones citados y con la misma tarea, a la china Hou Yifan, a la india Koneru Humpy y a las hermanas Muzichuk (de Ucrania), reforzando los mercados asiáticos y de la Europa del este. Además, escogería como entrenadora y directora general del equipo a un mito como Judit Polgar. Arrasaríamos.
Ahora que en España estamos atravesando una de nuestras mejores épocas podríamos acompañar a esa pléyade de figuras con jugadores nacionales de calidad. Iván Salgado, David Antón y Paco Vallejo (que ya inicia su declive, pero aún tiene varios años buenos por delante) podrían ser los Isco, Asensio o Nacho del equipo de ajedrez.
Junto a ellos, también cabe pensar en algún veterano dispuesto a terminar aquí su carrera con honores. Además del citado Anand, estoy pensando en Topalov, en Adams o en un jugador extraordinario y poco conocido: Simen Agdestein, que fue profesor y entrenador de Carlsen y reúne dos condiciones inusuales, pues además de haber sido campeón de Noruega de ajedrez también ha sido internacional con su selección de fútbol.
La inversión no tendría por qué ser muy alta; los sueldos de los ajedrecistas están muy por debajo de los de otros deportistas, con la posible excepción de Carlsen, y la repercusión sería enorme. Apuesto a que se le sacaría rendimiento en pocos años, quizá desde el principio.
Un argumento oblicuo, que contribuye a apoyar la propuesta, recoge la tradición reciente del torneo de Linares, que fuera el más prestigioso del mundo hasta su desaparición hace diez años. El recuerdo sigue fresco, y un club de ajedrez llamado Real Madrid podría aprovechar el tirón y las sinergias indudables.
El ejemplo del Real Madrid podría estimular a otros clubes con solera; en Holanda se disputa anualmente el torneo de Wijk aan Zee, y en Alemania el de Dortmund, ¿no sería precioso disputar la copa de Europa de ajedrez frente a un Ajax o un Borussia?


El proyecto está apenas esbozado; hay muchas dificultades que vencer y muchas preguntas que responder. Quizá al principio leeríamos en las crónicas párrafos como “avanza Carlsen con la torre hasta la línea de fondo, donde le sale al paso Caruana con su caballo y despeja el peón al centro del tablero; Karjakin le pasa el alfil a Yifan que se interna en diagonal hacia el área rival donde Anish Giri consigue alejar el peligro cuando Vallejo se disponía a dar jaque de cabeza”, pero los periodistas terminarían por aprender (algunos). También hay que resolver la cuestión de los horarios de emisión, por tratarse de un deporte violento, del que habría que proteger al público infantil, y el asunto de la colocación de las cámaras, los comentarios técnicos, los arbitrajes y muchos otros, pero ninguno de esos problemas es irresoluble.



Con todo, reconozco que la idea es descabellada, ¡por eso la propongo! Antes de que los amables enfermeros que me han regalado esta camisa terminen de atar las mangas a la espalda, déjenme concluir: el Real Madrid ha llegado a ser lo que es por atreverse con proyectos visionarios, en los que no creían las personas sensatas, y por realizarlos a lo grande, con los mejores del mundo. Ese es el reto que planteo, el guante que lanzo aquí. Quedan muchos detalles por discutir, mucho por limar, corregir y descartar; pongámonos a la tarea.

La partida es larga, pero yo me atrevo a comenzarla con una jugada audaz, que declara mis intenciones de jugar al ataque: 1.e4

Mueven negras.


Es evidente que el autor va de "coña", pero por soñar que no quede, ya la tuvimos hace muchísimos años

Saludos blancos, castellanos y comuneros
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Capa
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#64Mensaje

Quien ha escrito eso?
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#65Mensaje

comunero escribió:No va a ser fácil. A ver, que levanten la mano los que sean partidarios de crear una sección de ajedrez.

Era de esperar. Gracias, mamá, ya puedes bajar el brazo. La verdad es que me imaginaba que la propuesta no iba a ser recibida con gritos de entusiasmo, precisamente. Pero déjenme que les explique. Pónganse cómodos.

Desde hace muchos años, el Real Madrid es un club con sólo dos secciones: la de fútbol y la de baloncesto. Pero eso es algo circunstancial: ni siempre fue así ni tiene por qué seguir siendo así en el futuro; cuando Manolo Santana ganó el torneo de Wimbledon en 1966, vestía una camiseta del Real Madrid, y ese trofeo luce en nuestras vitrinas como prueba de que en una época tuvimos una sección de tenis, de la que, por supuesto, formaba parte el mejor jugador español (y digo sólo el mejor de los españoles, porque en los años sesenta no era realista pensar en tener a Rod Laver en nuestras filas).

De hecho, son docenas las modalidades deportivas que han tenido su hueco en el Real Madrid, entre ellas algunas tan entrañables o exóticas como la petanca, el remo, la pelota, el boxeo y la esgrima.

Si están ustedes pensando que aquello no pasaría de ser un detalle folclórico, unos meros coros y danzas, o adornos florales para lucir en los desfiles, permitan que les diga que se equivocan de medio a medio: junto al mencionado trofeo de Wimbledon que ganara Santana para el Real Madrid en 1966, podemos presumir de varios campeonatos de España en disciplinas tan variadas como el béisbol, la pelota (en pala y en cesta punta), el balonmano, la halterofilia y la lucha grecorromana, así como de dos campeonatos de Europa de boxeo (¿les suena Fred Galiana?), un récord nacional de lanzamiento de disco (del polifacético Miguel de la Quadra Salcedo) y uno del mundo de 1500 metros (gracias a José Luis González). No sigo, para no aburrir con datos. Pero queda claro que no se trataba de comparsas. Alberto Cosín escribió hace tiempo un magnífico artículo, un alarde de erudición, cuya lectura recomiendo. El que está usted leyendo en estos momentos va enfocado a una disciplina casi marginal y algo exótica.

Y el ajedrez, ¿qué? Otra vez campeones de Europa, ¿no? Pues no, campeones de Europa no hemos sido nunca, por la sencilla razón de que los españoles no hemos pintado (casi) nada desde los tiempos de Lucena y Ruy López, pero dentro de nuestras limitaciones, el Real Madrid ha mantenido una división de ajedrez en la que han militado los primeros espadas del país, encabezados por el legendario Arturo Pomar, acaso el único ajedrecista español al que se pueda calificar verdaderamente de popular. Junto a él, hemos contado con notables jugadores, entre los que no puedo dejar de nombrar a José Sanz Aguado, que dejó para la historia una partida (Ortueta – Sanz, 1933) con un extraordinario remate. Con Pomar, Sanz y otros deportistas conquistamos varios campeonatos nacionales, tanto en individual como por equipos.



La sección de ajedrez del Real Madrid se clausuró hace muchos años, y seguramente nadie la echa de menos. Pero yo me atrevo a lanzar la sugerencia, puede que temeraria, de volver a abrirla, ahora que se dan varias circunstancias favorables (entre otras, el asunto del fútbol femenino) . Con la venia:

La división de ajedrez facilitaría la penetración de la marca “Real Madrid” en tres mercados enormes y poco explotados por nuestro club: el ruso, el chino y el indio. Rusia es la gran potencia histórica, donde la popularidad del ajedrez es inmensa; el Real Madrid podría potenciar su imagen incorporando al equipo a jugadores como Karjakin (que fue aspirante al título mundial), o los jóvenes Artemiev y Fedoseev. China es el futuro (que ya está aquí); seguramente el próximo campeón del mundo será un chino; Ding Liren y Wang Hao serían unos fichajes magníficos, el jovencísimo Wei Yi podría ser el Vinicius del ajedrez. La India, además de tener una gran tradición, es la patria del anterior poseedor del título, Vishy Anand; traerlo a Madrid a que dejara aquí sus últimas gotas de talento sería un acierto indudable, y no debe de resultar muy difícil, puesto que vivió bastantes años en Collado Mediano, cerca de Madrid.
Nuestra principal baza es el actual campeón mundial de ajedrez, el noruego Magnus Carlsen (¡qué nombre tan madridista!), declarado seguidor de nuestro club. Con motivo de su vigésimo tercer cumpleaños realizó el saque de honor en el partido Real Madrid – Valladolid de liga, y se le veía entusiasmado. No creo que costara convencerlo para que fichara por un equipo de ajedrez llamado Real Madrid. Sin duda, sería el Alfredo Di Stéfano de la sección.
En ajedrez no hay razón para distinguir entre hombres y mujeres, lo que nos ofrece una ocasión pintiparada para romper moldes. Ni sección femenina ni gaitas. Yo incluiría en el equipo, junto a los varones citados y con la misma tarea, a la china Hou Yifan, a la india Koneru Humpy y a las hermanas Muzichuk (de Ucrania), reforzando los mercados asiáticos y de la Europa del este. Además, escogería como entrenadora y directora general del equipo a un mito como Judit Polgar. Arrasaríamos.
Ahora que en España estamos atravesando una de nuestras mejores épocas podríamos acompañar a esa pléyade de figuras con jugadores nacionales de calidad. Iván Salgado, David Antón y Paco Vallejo (que ya inicia su declive, pero aún tiene varios años buenos por delante) podrían ser los Isco, Asensio o Nacho del equipo de ajedrez.
Junto a ellos, también cabe pensar en algún veterano dispuesto a terminar aquí su carrera con honores. Además del citado Anand, estoy pensando en Topalov, en Adams o en un jugador extraordinario y poco conocido: Simen Agdestein, que fue profesor y entrenador de Carlsen y reúne dos condiciones inusuales, pues además de haber sido campeón de Noruega de ajedrez también ha sido internacional con su selección de fútbol.
La inversión no tendría por qué ser muy alta; los sueldos de los ajedrecistas están muy por debajo de los de otros deportistas, con la posible excepción de Carlsen, y la repercusión sería enorme. Apuesto a que se le sacaría rendimiento en pocos años, quizá desde el principio.
Un argumento oblicuo, que contribuye a apoyar la propuesta, recoge la tradición reciente del torneo de Linares, que fuera el más prestigioso del mundo hasta su desaparición hace diez años. El recuerdo sigue fresco, y un club de ajedrez llamado Real Madrid podría aprovechar el tirón y las sinergias indudables.
El ejemplo del Real Madrid podría estimular a otros clubes con solera; en Holanda se disputa anualmente el torneo de Wijk aan Zee, y en Alemania el de Dortmund, ¿no sería precioso disputar la copa de Europa de ajedrez frente a un Ajax o un Borussia?


El proyecto está apenas esbozado; hay muchas dificultades que vencer y muchas preguntas que responder. Quizá al principio leeríamos en las crónicas párrafos como “avanza Carlsen con la torre hasta la línea de fondo, donde le sale al paso Caruana con su caballo y despeja el peón al centro del tablero; Karjakin le pasa el alfil a Yifan que se interna en diagonal hacia el área rival donde Anish Giri consigue alejar el peligro cuando Vallejo se disponía a dar jaque de cabeza”, pero los periodistas terminarían por aprender (algunos). También hay que resolver la cuestión de los horarios de emisión, por tratarse de un deporte violento, del que habría que proteger al público infantil, y el asunto de la colocación de las cámaras, los comentarios técnicos, los arbitrajes y muchos otros, pero ninguno de esos problemas es irresoluble.



Con todo, reconozco que la idea es descabellada, ¡por eso la propongo! Antes de que los amables enfermeros que me han regalado esta camisa terminen de atar las mangas a la espalda, déjenme concluir: el Real Madrid ha llegado a ser lo que es por atreverse con proyectos visionarios, en los que no creían las personas sensatas, y por realizarlos a lo grande, con los mejores del mundo. Ese es el reto que planteo, el guante que lanzo aquí. Quedan muchos detalles por discutir, mucho por limar, corregir y descartar; pongámonos a la tarea.

La partida es larga, pero yo me atrevo a comenzarla con una jugada audaz, que declara mis intenciones de jugar al ataque: 1.e4

Mueven negras.


Es evidente que el autor va de "coña", pero por soñar que no quede, ya la tuvimos hace muchísimos años

Saludos blancos, castellanos y comuneros



Como siempre, eres el pu.. amo contando historias, Pero te voy a hacer una critica un poco en la barra de bar. No he seguido tu trayectoria y no se si estas metido en otros proyectos pero te veo que estas estancado en un monotema, tienes un gran potencial que no deberías desaprovechar (repito, no sé como estas yendo, simplemente es una sensación y por lo que he leído es complicado meterte en el mundillo), que fuera del colegueo es una verdad como un templo, tienes un buen timing y ademas eres muy creativo que es muy importante también.


Tras esta critica-consejo (con toda la buena fe) no dejes de sacar joyazas.
Gol_de_Nayim

#66Mensaje

comunero escribió:No va a ser fácil. A ver, que levanten la mano los que sean partidarios de crear una sección de ajedrez.

Era de esperar. Gracias, mamá, ya puedes bajar el brazo. La verdad es que me imaginaba que la propuesta no iba a ser recibida con gritos de entusiasmo, precisamente. Pero déjenme que les explique. Pónganse cómodos.

Desde hace muchos años, el Real Madrid es un club con sólo dos secciones: la de fútbol y la de baloncesto. Pero eso es algo circunstancial: ni siempre fue así ni tiene por qué seguir siendo así en el futuro; cuando Manolo Santana ganó el torneo de Wimbledon en 1966, vestía una camiseta del Real Madrid, y ese trofeo luce en nuestras vitrinas como prueba de que en una época tuvimos una sección de tenis, de la que, por supuesto, formaba parte el mejor jugador español (y digo sólo el mejor de los españoles, porque en los años sesenta no era realista pensar en tener a Rod Laver en nuestras filas).

De hecho, son docenas las modalidades deportivas que han tenido su hueco en el Real Madrid, entre ellas algunas tan entrañables o exóticas como la petanca, el remo, la pelota, el boxeo y la esgrima.

Si están ustedes pensando que aquello no pasaría de ser un detalle folclórico, unos meros coros y danzas, o adornos florales para lucir en los desfiles, permitan que les diga que se equivocan de medio a medio: junto al mencionado trofeo de Wimbledon que ganara Santana para el Real Madrid en 1966, podemos presumir de varios campeonatos de España en disciplinas tan variadas como el béisbol, la pelota (en pala y en cesta punta), el balonmano, la halterofilia y la lucha grecorromana, así como de dos campeonatos de Europa de boxeo (¿les suena Fred Galiana?), un récord nacional de lanzamiento de disco (del polifacético Miguel de la Quadra Salcedo) y uno del mundo de 1500 metros (gracias a José Luis González). No sigo, para no aburrir con datos. Pero queda claro que no se trataba de comparsas. Alberto Cosín escribió hace tiempo un magnífico artículo, un alarde de erudición, cuya lectura recomiendo. El que está usted leyendo en estos momentos va enfocado a una disciplina casi marginal y algo exótica.

Y el ajedrez, ¿qué? Otra vez campeones de Europa, ¿no? Pues no, campeones de Europa no hemos sido nunca, por la sencilla razón de que los españoles no hemos pintado (casi) nada desde los tiempos de Lucena y Ruy López, pero dentro de nuestras limitaciones, el Real Madrid ha mantenido una división de ajedrez en la que han militado los primeros espadas del país, encabezados por el legendario Arturo Pomar, acaso el único ajedrecista español al que se pueda calificar verdaderamente de popular. Junto a él, hemos contado con notables jugadores, entre los que no puedo dejar de nombrar a José Sanz Aguado, que dejó para la historia una partida (Ortueta – Sanz, 1933) con un extraordinario remate. Con Pomar, Sanz y otros deportistas conquistamos varios campeonatos nacionales, tanto en individual como por equipos.



La sección de ajedrez del Real Madrid se clausuró hace muchos años, y seguramente nadie la echa de menos. Pero yo me atrevo a lanzar la sugerencia, puede que temeraria, de volver a abrirla, ahora que se dan varias circunstancias favorables (entre otras, el asunto del fútbol femenino) . Con la venia:

La división de ajedrez facilitaría la penetración de la marca “Real Madrid” en tres mercados enormes y poco explotados por nuestro club: el ruso, el chino y el indio. Rusia es la gran potencia histórica, donde la popularidad del ajedrez es inmensa; el Real Madrid podría potenciar su imagen incorporando al equipo a jugadores como Karjakin (que fue aspirante al título mundial), o los jóvenes Artemiev y Fedoseev. China es el futuro (que ya está aquí); seguramente el próximo campeón del mundo será un chino; Ding Liren y Wang Hao serían unos fichajes magníficos, el jovencísimo Wei Yi podría ser el Vinicius del ajedrez. La India, además de tener una gran tradición, es la patria del anterior poseedor del título, Vishy Anand; traerlo a Madrid a que dejara aquí sus últimas gotas de talento sería un acierto indudable, y no debe de resultar muy difícil, puesto que vivió bastantes años en Collado Mediano, cerca de Madrid.
Nuestra principal baza es el actual campeón mundial de ajedrez, el noruego Magnus Carlsen (¡qué nombre tan madridista!), declarado seguidor de nuestro club. Con motivo de su vigésimo tercer cumpleaños realizó el saque de honor en el partido Real Madrid – Valladolid de liga, y se le veía entusiasmado. No creo que costara convencerlo para que fichara por un equipo de ajedrez llamado Real Madrid. Sin duda, sería el Alfredo Di Stéfano de la sección.
En ajedrez no hay razón para distinguir entre hombres y mujeres, lo que nos ofrece una ocasión pintiparada para romper moldes. Ni sección femenina ni gaitas. Yo incluiría en el equipo, junto a los varones citados y con la misma tarea, a la china Hou Yifan, a la india Koneru Humpy y a las hermanas Muzichuk (de Ucrania), reforzando los mercados asiáticos y de la Europa del este. Además, escogería como entrenadora y directora general del equipo a un mito como Judit Polgar. Arrasaríamos.
Ahora que en España estamos atravesando una de nuestras mejores épocas podríamos acompañar a esa pléyade de figuras con jugadores nacionales de calidad. Iván Salgado, David Antón y Paco Vallejo (que ya inicia su declive, pero aún tiene varios años buenos por delante) podrían ser los Isco, Asensio o Nacho del equipo de ajedrez.
Junto a ellos, también cabe pensar en algún veterano dispuesto a terminar aquí su carrera con honores. Además del citado Anand, estoy pensando en Topalov, en Adams o en un jugador extraordinario y poco conocido: Simen Agdestein, que fue profesor y entrenador de Carlsen y reúne dos condiciones inusuales, pues además de haber sido campeón de Noruega de ajedrez también ha sido internacional con su selección de fútbol.
La inversión no tendría por qué ser muy alta; los sueldos de los ajedrecistas están muy por debajo de los de otros deportistas, con la posible excepción de Carlsen, y la repercusión sería enorme. Apuesto a que se le sacaría rendimiento en pocos años, quizá desde el principio.
Un argumento oblicuo, que contribuye a apoyar la propuesta, recoge la tradición reciente del torneo de Linares, que fuera el más prestigioso del mundo hasta su desaparición hace diez años. El recuerdo sigue fresco, y un club de ajedrez llamado Real Madrid podría aprovechar el tirón y las sinergias indudables.
El ejemplo del Real Madrid podría estimular a otros clubes con solera; en Holanda se disputa anualmente el torneo de Wijk aan Zee, y en Alemania el de Dortmund, ¿no sería precioso disputar la copa de Europa de ajedrez frente a un Ajax o un Borussia?


El proyecto está apenas esbozado; hay muchas dificultades que vencer y muchas preguntas que responder. Quizá al principio leeríamos en las crónicas párrafos como “avanza Carlsen con la torre hasta la línea de fondo, donde le sale al paso Caruana con su caballo y despeja el peón al centro del tablero; Karjakin le pasa el alfil a Yifan que se interna en diagonal hacia el área rival donde Anish Giri consigue alejar el peligro cuando Vallejo se disponía a dar jaque de cabeza”, pero los periodistas terminarían por aprender (algunos). También hay que resolver la cuestión de los horarios de emisión, por tratarse de un deporte violento, del que habría que proteger al público infantil, y el asunto de la colocación de las cámaras, los comentarios técnicos, los arbitrajes y muchos otros, pero ninguno de esos problemas es irresoluble.



Con todo, reconozco que la idea es descabellada, ¡por eso la propongo! Antes de que los amables enfermeros que me han regalado esta camisa terminen de atar las mangas a la espalda, déjenme concluir: el Real Madrid ha llegado a ser lo que es por atreverse con proyectos visionarios, en los que no creían las personas sensatas, y por realizarlos a lo grande, con los mejores del mundo. Ese es el reto que planteo, el guante que lanzo aquí. Quedan muchos detalles por discutir, mucho por limar, corregir y descartar; pongámonos a la tarea.

La partida es larga, pero yo me atrevo a comenzarla con una jugada audaz, que declara mis intenciones de jugar al ataque: 1.e4

Mueven negras.


Es evidente que el autor va de "coña", pero por soñar que no quede, ya la tuvimos hace muchísimos años

Saludos blancos, castellanos y comuneros
Sería bonito ver a Rafa Nadal con el escudo del Madrid, o Magnus Carlsen jugando de Madridista... y así con otros tantos deportes que se nos pudieran ocurrir. El R.Madrid debería ser una institución deportiva presente en todas las disciplinas.

Gran escrito comunero.


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j30madr
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#67Mensaje

Yo de ajedrez se mover las piezas y alguna apertura ,pero soy muy malo

La apertura española es mi favorita pq te permite sacar las piezas y enrocar muy rápido

En negras la defensa caro Kann me parece muy sólida


Si os gusta seguir ajedrez jugadas y eso ,os recomiendo a un maestro mexicano en Youtube Manuel morsa ,es muy divertido y explica muy bien.
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Apostata
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#68Mensaje

Yo tuve que dejar de jugar al ajedrez, porque soy muy obsesivo y el ajedrez te devora.

Tuve una época que dedicaba todo mi tiempo libre a jugar al ajedrez, incluidas las noches. Tenía una relación con una chica y se fue a hacer puñetas, porque me quedaba en los cibercafes echando partidas en el Yahoo Juegos, y llegaba a casa de madrugada, como un ludópata.

Me obsesionaban sobre todo las aperturas raras y extremas. Había una de peón de torre que era delirante y casi me come la vida. Los 3 primeros movimientos los malgastabas adelantando el peón de torre de la reina, ¡y al cuarto te lo dejabas comer!

Le regalabas al rival tres movimientos de desarrollo, el centro del tablero y un peón de ventaja. A cambio sólo ganabas una cosa, que él se movía por un terreno desconocido mientras tú te sabías de memoria las posiciones que se derivaban de semejante locura.

Sabías que la mayoría de los jugadores se iban a complicar la vida defendiendo el peón que les quedaba doblado al comer, contabas con una potente línea de torre despejada, te entrenabas en el arte de dar por culo a su despliegue central. Y si el tío mantenía el tipo y se centraba en aprovechar su control del centro del tablero, poco podías, pero la realidad es que muchos se desquiciaban, que no sabían aprovechar la ventaja y acababan enmarañados en una defensa extraña para ellos.

Regalabas muchas partidas con una apertura así, pero daba mucha satisfacción ganar haciendo esas locuras. Y yo me dedicaba horas a estudiar las variantes para compensar la desventaja de posición con un conocimiento milimetrado de las respuestas.

Al final lo tuve que dejar, porque no tenía vida.
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Capa
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#69Mensaje

j30madr escribió:Yo de ajedrez se mover las piezas y alguna apertura ,pero soy muy malo

La apertura española es mi favorita pq te permite sacar las piezas y enrocar muy rápido

En negras la defensa caro Kann me parece muy sólida


Si os gusta seguir ajedrez jugadas y eso ,os recomiendo a un maestro mexicano en Youtube Manuel morsa ,es muy divertido y explica muy bien.
No jodas j
Morsa , jajajaja. Si es un paquete .
Encima defensa Caro Khan , que sería un símil al fútbol que propone Zidane.

Yo recomiendo estos vídeos de Sabrina Vega , además de explicar de maravilla te entra modorra escucharla.
Vienen genial para irte a sobar.
[youtube]SKBFcBLBcZk[/youtube]



Por cierto ya teníamos a uno que jugaba con la chaqueta del chándal del Madrid , hasta que la FIDE se puso dura con la indumentaria y obligaba llevar un tipo de ropa determinada .

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Capa
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#70Mensaje

Apostata escribió:Yo tuve que dejar de jugar al ajedrez, porque soy muy obsesivo y el ajedrez te devora.

Tuve una época que dedicaba todo mi tiempo libre a jugar al ajedrez, incluidas las noches. Tenía una relación con una chica y se fue a hacer puñetas, porque me quedaba en los cibercafes echando partidas en el Yahoo Juegos, y llegaba a casa de madrugada, como un ludópata.

Me obsesionaban sobre todo las aperturas raras y extremas. Había una de peón de torre que era delirante y casi me come la vida. Los 3 primeros movimientos los malgastabas adelantando el peón de torre de la reina, ¡y al cuarto te lo dejabas comer!

Le regalabas al rival tres movimientos de desarrollo, el centro del tablero y un peón de ventaja. A cambio sólo ganabas una cosa, que él se movía por un terreno desconocido mientras tú te sabías de memoria las posiciones que se derivaban de semejante locura.

Sabías que la mayoría de los jugadores se iban a complicar la vida defendiendo el peón que les quedaba doblado al comer, contabas con una potente línea de torre despejada, te entrenabas en el arte de dar por culo a su despliegue central. Y si el tío mantenía el tipo y se centraba en aprovechar su control del centro del tablero, poco podías, pero la realidad es que muchos se desquiciaban, que no sabían aprovechar la ventaja y acababan enmarañados en una defensa extraña para ellos.

Regalabas muchas partidas con una apertura así, pero daba mucha satisfacción ganar haciendo esas locuras. Y yo me dedicaba horas a estudiar las variantes para compensar la desventaja de posición con un conocimiento milimetrado de las respuestas.

Al final lo tuve que dejar, porque no tenía vida.
Es un vicio .
Yo también tengo mis épocas de jugar mucho .

Es un deporte o lo que queráis llamar que Internet le ha venido de lujo.

También soy de aperturas raras , de enfangar las partidas y de obviar los principios básicos del ajedrez ( control del centro, estructura de peones , enrocarse para dar seguridad al rey, etc. ...), soy demasiado perezoso como para estudiar .
Es raro la partida que no sacrifique un peón o incluso una pieza a cambio de la iniciativa .

Te enseño alguna partida mía que no vas a entender pero vas a disfrutar .

Llevo blancas .

https://chess-db.com/public/game.jsp?id ... 0224.29151
mauricio72

#71Mensaje

cuando uno hace jaque mate ¿la aficion puede hacer avalanchas como en el futbol?
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Apostata
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#72Mensaje

Capa escribió:
Apostata escribió:Yo tuve que dejar de jugar al ajedrez, porque soy muy obsesivo y el ajedrez te devora.

Tuve una época que dedicaba todo mi tiempo libre a jugar al ajedrez, incluidas las noches. Tenía una relación con una chica y se fue a hacer puñetas, porque me quedaba en los cibercafes echando partidas en el Yahoo Juegos, y llegaba a casa de madrugada, como un ludópata.

Me obsesionaban sobre todo las aperturas raras y extremas. Había una de peón de torre que era delirante y casi me come la vida. Los 3 primeros movimientos los malgastabas adelantando el peón de torre de la reina, ¡y al cuarto te lo dejabas comer!

Le regalabas al rival tres movimientos de desarrollo, el centro del tablero y un peón de ventaja. A cambio sólo ganabas una cosa, que él se movía por un terreno desconocido mientras tú te sabías de memoria las posiciones que se derivaban de semejante locura.

Sabías que la mayoría de los jugadores se iban a complicar la vida defendiendo el peón que les quedaba doblado al comer, contabas con una potente línea de torre despejada, te entrenabas en el arte de dar por culo a su despliegue central. Y si el tío mantenía el tipo y se centraba en aprovechar su control del centro del tablero, poco podías, pero la realidad es que muchos se desquiciaban, que no sabían aprovechar la ventaja y acababan enmarañados en una defensa extraña para ellos.

Regalabas muchas partidas con una apertura así, pero daba mucha satisfacción ganar haciendo esas locuras. Y yo me dedicaba horas a estudiar las variantes para compensar la desventaja de posición con un conocimiento milimetrado de las respuestas.

Al final lo tuve que dejar, porque no tenía vida.
Es un vicio .
Yo también tengo mis épocas de jugar mucho .

Es un deporte o lo que queráis llamar que Internet le ha venido de lujo.

También soy de aperturas raras , de enfangar las partidas y de obviar los principios básicos del ajedrez ( control del centro, estructura de peones , enrocarse para dar seguridad al rey, etc. ...), soy demasiado perezoso como para estudiar .
Es raro la partida que no sacrifique un peón o incluso una pieza a cambio de la iniciativa .

Te enseño alguna partida mía que no vas a entender pero vas a disfrutar .

Llevo blancas .

https://chess-db.com/public/game.jsp?id ... 0224.29151
¿Pero el peón de torre que te jama al principio, te lo dejas o se lo dejas? Porque el caballo entiendo que lo sacrificas para lanzar el ataque, ¿pero ese peón? Si las negras, en vez de hacer el cabra avanzando tanto ese peón hasta b5, se centran en seguir completando el desarrollo, entiendo que pierdes el peón sin opción posterior a lanzar ese ataque.

Y luego, ando muy desentrenado, pero no entiendo su movimiento de reina. ¿Por qué en lugar de bajarla a cubrir su alfil, la adelanta y deja que lo haga el rey? Pero si tienes toda la artillería apuntando al centro ¿porqué en lugar de reforzar la posición del rey, retira a la reina y lo expone a darse un viaje entre tantas posibles amemazas?
Madridistaypunto
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#73Mensaje

No podéis llamar deporte a algo que se juega sin red. O_o O_o
Para mí es demasiado profundo y con miles, ¡¡¡ Millones !!! de variantes, me pierdo desde el segundo 1. :sisi: :sisi:
comunero
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#74Mensaje

Gol_de_Nayim escribió:
comunero escribió:No va a ser fácil. A ver, que levanten la mano los que sean partidarios de crear una sección de ajedrez.

Era de esperar. Gracias, mamá, ya puedes bajar el brazo. La verdad es que me imaginaba que la propuesta no iba a ser recibida con gritos de entusiasmo, precisamente. Pero déjenme que les explique. Pónganse cómodos.

Desde hace muchos años, el Real Madrid es un club con sólo dos secciones: la de fútbol y la de baloncesto. Pero eso es algo circunstancial: ni siempre fue así ni tiene por qué seguir siendo así en el futuro; cuando Manolo Santana ganó el torneo de Wimbledon en 1966, vestía una camiseta del Real Madrid, y ese trofeo luce en nuestras vitrinas como prueba de que en una época tuvimos una sección de tenis, de la que, por supuesto, formaba parte el mejor jugador español (y digo sólo el mejor de los españoles, porque en los años sesenta no era realista pensar en tener a Rod Laver en nuestras filas).

De hecho, son docenas las modalidades deportivas que han tenido su hueco en el Real Madrid, entre ellas algunas tan entrañables o exóticas como la petanca, el remo, la pelota, el boxeo y la esgrima.

Si están ustedes pensando que aquello no pasaría de ser un detalle folclórico, unos meros coros y danzas, o adornos florales para lucir en los desfiles, permitan que les diga que se equivocan de medio a medio: junto al mencionado trofeo de Wimbledon que ganara Santana para el Real Madrid en 1966, podemos presumir de varios campeonatos de España en disciplinas tan variadas como el béisbol, la pelota (en pala y en cesta punta), el balonmano, la halterofilia y la lucha grecorromana, así como de dos campeonatos de Europa de boxeo (¿les suena Fred Galiana?), un récord nacional de lanzamiento de disco (del polifacético Miguel de la Quadra Salcedo) y uno del mundo de 1500 metros (gracias a José Luis González). No sigo, para no aburrir con datos. Pero queda claro que no se trataba de comparsas. Alberto Cosín escribió hace tiempo un magnífico artículo, un alarde de erudición, cuya lectura recomiendo. El que está usted leyendo en estos momentos va enfocado a una disciplina casi marginal y algo exótica.

Y el ajedrez, ¿qué? Otra vez campeones de Europa, ¿no? Pues no, campeones de Europa no hemos sido nunca, por la sencilla razón de que los españoles no hemos pintado (casi) nada desde los tiempos de Lucena y Ruy López, pero dentro de nuestras limitaciones, el Real Madrid ha mantenido una división de ajedrez en la que han militado los primeros espadas del país, encabezados por el legendario Arturo Pomar, acaso el único ajedrecista español al que se pueda calificar verdaderamente de popular. Junto a él, hemos contado con notables jugadores, entre los que no puedo dejar de nombrar a José Sanz Aguado, que dejó para la historia una partida (Ortueta – Sanz, 1933) con un extraordinario remate. Con Pomar, Sanz y otros deportistas conquistamos varios campeonatos nacionales, tanto en individual como por equipos.



La sección de ajedrez del Real Madrid se clausuró hace muchos años, y seguramente nadie la echa de menos. Pero yo me atrevo a lanzar la sugerencia, puede que temeraria, de volver a abrirla, ahora que se dan varias circunstancias favorables (entre otras, el asunto del fútbol femenino) . Con la venia:

La división de ajedrez facilitaría la penetración de la marca “Real Madrid” en tres mercados enormes y poco explotados por nuestro club: el ruso, el chino y el indio. Rusia es la gran potencia histórica, donde la popularidad del ajedrez es inmensa; el Real Madrid podría potenciar su imagen incorporando al equipo a jugadores como Karjakin (que fue aspirante al título mundial), o los jóvenes Artemiev y Fedoseev. China es el futuro (que ya está aquí); seguramente el próximo campeón del mundo será un chino; Ding Liren y Wang Hao serían unos fichajes magníficos, el jovencísimo Wei Yi podría ser el Vinicius del ajedrez. La India, además de tener una gran tradición, es la patria del anterior poseedor del título, Vishy Anand; traerlo a Madrid a que dejara aquí sus últimas gotas de talento sería un acierto indudable, y no debe de resultar muy difícil, puesto que vivió bastantes años en Collado Mediano, cerca de Madrid.
Nuestra principal baza es el actual campeón mundial de ajedrez, el noruego Magnus Carlsen (¡qué nombre tan madridista!), declarado seguidor de nuestro club. Con motivo de su vigésimo tercer cumpleaños realizó el saque de honor en el partido Real Madrid – Valladolid de liga, y se le veía entusiasmado. No creo que costara convencerlo para que fichara por un equipo de ajedrez llamado Real Madrid. Sin duda, sería el Alfredo Di Stéfano de la sección.
En ajedrez no hay razón para distinguir entre hombres y mujeres, lo que nos ofrece una ocasión pintiparada para romper moldes. Ni sección femenina ni gaitas. Yo incluiría en el equipo, junto a los varones citados y con la misma tarea, a la china Hou Yifan, a la india Koneru Humpy y a las hermanas Muzichuk (de Ucrania), reforzando los mercados asiáticos y de la Europa del este. Además, escogería como entrenadora y directora general del equipo a un mito como Judit Polgar. Arrasaríamos.
Ahora que en España estamos atravesando una de nuestras mejores épocas podríamos acompañar a esa pléyade de figuras con jugadores nacionales de calidad. Iván Salgado, David Antón y Paco Vallejo (que ya inicia su declive, pero aún tiene varios años buenos por delante) podrían ser los Isco, Asensio o Nacho del equipo de ajedrez.
Junto a ellos, también cabe pensar en algún veterano dispuesto a terminar aquí su carrera con honores. Además del citado Anand, estoy pensando en Topalov, en Adams o en un jugador extraordinario y poco conocido: Simen Agdestein, que fue profesor y entrenador de Carlsen y reúne dos condiciones inusuales, pues además de haber sido campeón de Noruega de ajedrez también ha sido internacional con su selección de fútbol.
La inversión no tendría por qué ser muy alta; los sueldos de los ajedrecistas están muy por debajo de los de otros deportistas, con la posible excepción de Carlsen, y la repercusión sería enorme. Apuesto a que se le sacaría rendimiento en pocos años, quizá desde el principio.
Un argumento oblicuo, que contribuye a apoyar la propuesta, recoge la tradición reciente del torneo de Linares, que fuera el más prestigioso del mundo hasta su desaparición hace diez años. El recuerdo sigue fresco, y un club de ajedrez llamado Real Madrid podría aprovechar el tirón y las sinergias indudables.
El ejemplo del Real Madrid podría estimular a otros clubes con solera; en Holanda se disputa anualmente el torneo de Wijk aan Zee, y en Alemania el de Dortmund, ¿no sería precioso disputar la copa de Europa de ajedrez frente a un Ajax o un Borussia?


El proyecto está apenas esbozado; hay muchas dificultades que vencer y muchas preguntas que responder. Quizá al principio leeríamos en las crónicas párrafos como “avanza Carlsen con la torre hasta la línea de fondo, donde le sale al paso Caruana con su caballo y despeja el peón al centro del tablero; Karjakin le pasa el alfil a Yifan que se interna en diagonal hacia el área rival donde Anish Giri consigue alejar el peligro cuando Vallejo se disponía a dar jaque de cabeza”, pero los periodistas terminarían por aprender (algunos). También hay que resolver la cuestión de los horarios de emisión, por tratarse de un deporte violento, del que habría que proteger al público infantil, y el asunto de la colocación de las cámaras, los comentarios técnicos, los arbitrajes y muchos otros, pero ninguno de esos problemas es irresoluble.



Con todo, reconozco que la idea es descabellada, ¡por eso la propongo! Antes de que los amables enfermeros que me han regalado esta camisa terminen de atar las mangas a la espalda, déjenme concluir: el Real Madrid ha llegado a ser lo que es por atreverse con proyectos visionarios, en los que no creían las personas sensatas, y por realizarlos a lo grande, con los mejores del mundo. Ese es el reto que planteo, el guante que lanzo aquí. Quedan muchos detalles por discutir, mucho por limar, corregir y descartar; pongámonos a la tarea.

La partida es larga, pero yo me atrevo a comenzarla con una jugada audaz, que declara mis intenciones de jugar al ataque: 1.e4

Mueven negras.


Es evidente que el autor va de "coña", pero por soñar que no quede, ya la tuvimos hace muchísimos años

Saludos blancos, castellanos y comuneros
Sería bonito ver a Rafa Nadal con el escudo del Madrid, o Magnus Carlsen jugando de Madridista... y así con otros tantos deportes que se nos pudieran ocurrir. El R.Madrid debería ser una institución deportiva presente en todas las disciplinas.

Gran escrito comunero.


Imagen

Buenos días, revisando mi s últimos comentarios, veo que no ha quedado claro que la autoria de este excelente artículo no es mía, es de D. Fedérico García alias " Lurker". A cada uno lo suyo. Por cierto ya me gustaría que este artículo escrito un poco de " coña" se hiciese realidad, por dos motivos como aficionado al ajedrez y como padre, tengo un hijo que tiene bastante nivel. Por cierto el artículo esta publicado en un foro, oficialista, lo cual puede ser indicio de un globo sonda, de como recibiría la masa social esta iniciativa.
Saludos blancos, castellanos y comuneros
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Capa
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#75Mensaje

Qué bueno es Magnus Carlsen . :sisi: :sisi:
Lleva un 2019 estratosférico , está en modo Dios con más de 80 partidas a ritmo clásico sin perder contra rivales de élite . Es inalcanzable para el resto y posiblemente su nivel de juego actual sea el más alto que se ha visto a un ajedrecista en toda la historia.

Su partida de hoy contra Ding Liren ( número 3 del mundo y un jugador supersólido) que está a punto de acabar, es de tal perfección que da hasta miedo verla .

Si gana una partida más de las tres que quedan en el torneo que están jugando en Croacia , habrá batido el récord absoluto de ELO. Se colocaría con unos 2885 por los 2882 que ya tuvo hace años el propio Carlsen.
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Apostata
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#76Mensaje

Capa, mamón, me invitas a mirar una partida tuya y luego no me contestas al comentario.
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Capa
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#77Mensaje

Apostata escribió:Capa, mamón, me invitas a mirar una partida tuya y luego no me contestas al comentario.
Jaja. Es verdad perdona .
Pero después de ver jugar a Carlsen me da hasta vergüenza.
:oops:

Pues te voy a comentar lo que pasa por mi cerebro durante una partida .

A ese rival le conozco bastante, he jugado varias veces con él y sé que es bastante estudioso. Sabe bastante de aperturas y además juega prácticamente al toque . Lo que me saca de quicio.

Decido sacar mis piezas sin sentido ni lógica , sin planes , estorbándose unas a las otras, con un ataque ficticio por el centro que no iba a ningún sitio y él mientras tanto haciendo jugadas razonables , ocupando buena casillas , con una Dama ( o reina como tú dices ) muy móvil y planeando un juego por el flanco de rey muy prometedor . Casi todas sus piezas menores están en ese flanco. Se veía mucha armonía en su posición.

Pierdo un peón y cada vez me encuentro peor , seguimos jugando muy rápido los dos , yo porque soy muy nervioso y perezoso para pensar y él porque a veces va de sobrado.

Pero se equivoca de plan , en vez de enrocarse y poner en seguridad a su rey empieza a tirarme peones en el flanco de dama y yo ahí empiezo a pensar un poquito.
Así que me pregunto. - Que haces Edu?
Juegas normal y pierdes por posición o intentas hacer algo .-
Así que decido cambiar el espíritu de la posición. Sacrifico una pieza viendo que su rey sigue en el centro y sin enrocarse , por lo que las posibilidades de táctica y de liar la partida aumentan .

Ahí me muevo como pez en el agua .

Me deja comerme un alfil y tiene que comer él con el rey. Así que ha jamás se podrá enrocar .
Tocaba clavar los codos y empezar a tomarse esto en serio.
Me hace un par de jugadas flojas , su rey sigue en el centro y se han abierto columnas para mis torres , qué más puedo pedir de dónde venía ?

Le sorprendo con un sacrificio de Dama espectacular y la gente empieza a hacer corrillo al rededor de nuestra partida .
Pero era un sacrificio que solo daba tablas por repetición. Yo siempre con la esperanza de que hiciera alguna jugada floja , como así fue. En vez de repetir jugadas con el rey decide cubrirse con el Caballo. Ahí mi sexto sentido me decía que mi rival estaba perdido

Empiezo a calcular variantes y más variantes hasta llegar a una posición de mate o de ventaja decisiva .
También debo preocuparme de mi rey porque dejo la octava fila sin piezas y su Dama siempre me amenaza mate .
Hago 7-8 jugadas perfectas y únicas( especialmente estoy orgulloso de ese c3 ' tranquilo' para desplazar su Dama y evitar que me dé mate ) , él también hace las únicas para no recibirlo.

Pero ya tenía una posición ganadora , le gano la Dama y me quedo con pieza y peones de más .
Sigue jugando aunque ya no tenía sentido .

En estas posiciones el 99% de la gente abandona , él no. Hasta que no le das mate no se firma la planilla.

Jejej.
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Apostata
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#78Mensaje

Capa escribió:
Apostata escribió:Capa, mamón, me invitas a mirar una partida tuya y luego no me contestas al comentario.
Jaja. Es verdad perdona .
Pero después de ver jugar a Carlsen me da hasta vergüenza.
:oops:

Pues te voy a comentar lo que pasa por mi cerebro durante una partida .

A ese rival le conozco bastante, he jugado varias veces con él y sé que es bastante estudioso. Sabe bastante de aperturas y además juega prácticamente al toque . Lo que me saca de quicio.

Decido sacar mis piezas sin sentido ni lógica , sin planes , estorbándose unas a las otras, con un ataque ficticio por el centro que no iba a ningún sitio y él mientras tanto haciendo jugadas razonables , ocupando buena casillas , con una Dama ( o reina como tú dices ) muy móvil y planeando un juego por el flanco de rey muy prometedor . Casi todas sus piezas menores están en ese flanco. Se veía mucha armonía en su posición.

Pierdo un peón y cada vez me encuentro peor , seguimos jugando muy rápido los dos , yo porque soy muy nervioso y perezoso para pensar y él porque a veces va de sobrado.

Pero se equivoca de plan , en vez de enrocarse y poner en seguridad a su rey empieza a tirarme peones en el flanco de dama y yo ahí empiezo a pensar un poquito.
Así que me pregunto. - Que haces Edu?
Juegas normal y pierdes por posición o intentas hacer algo .-
Así que decido cambiar el espíritu de la posición. Sacrifico una pieza viendo que su rey sigue en el centro y sin enrocarse , por lo que las posibilidades de táctica y de liar la partida aumentan .

Ahí me muevo como pez en el agua .

Me deja comerme un alfil y tiene que comer él con el rey. Así que ha jamás se podrá enrocar .
Tocaba clavar los codos y empezar a tomarse esto en serio.
Me hace un par de jugadas flojas , su rey sigue en el centro y se han abierto columnas para mis torres , qué más puedo pedir de dónde venía ?

Le sorprendo con un sacrificio de Dama espectacular y la gente empieza a hacer corrillo al rededor de nuestra partida .
Pero era un sacrificio que solo daba tablas por repetición. Yo siempre con la esperanza de que hiciera alguna jugada floja , como así fue. En vez de repetir jugadas con el rey decide cubrirse con el Caballo. Ahí mi sexto sentido me decía que mi rival estaba perdido

Empiezo a calcular variantes y más variantes hasta llegar a una posición de mate o de ventaja decisiva .
También debo preocuparme de mi rey porque dejo la octava fila sin piezas y su Dama siempre me amenaza mate .
Hago 7-8 jugadas perfectas y únicas( especialmente estoy orgulloso de ese c3 ' tranquilo' para desplazar su Dama y evitar que me dé mate ) , él también hace las únicas para no recibirlo.

Pero ya tenía una posición ganadora , le gano la Dama y me quedo con pieza y peones de más .
Sigue jugando aunque ya no tenía sentido .

En estas posiciones el 99% de la gente abandona , él no. Hasta que no le das mate no se firma la planilla.

Jejej.
Osea, que básicamente es lo que yo había visto. El primer peón lo pierdes gratis, no forma parte del plan y luego él ignora la fuerte amenaza que tiene por el centro después de sacrificar tú un caballo, y en vez de proteger con su dama al alfil que está delante del rey, lo deja solo, casi en medio del tablero y sin posibilidad de enroque.

Me sigue pareciendo que, antes de eso, él se precipita al avanzar tanto su peón. Ya había ganado un peón de ventaja, podía dedicarse a terminar el desarrollo y jugar con esa pequeña ventaja. Y en lugar de eso, disloca la línea de peones, pierde dos movimientos para llegar a amenazarte el caballo, más otro en aceptar el gambito, y encima luego no cubre el socavón con la dama. No sé como andará de teoría pero parece de Zaragoza.
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Capa
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#79Mensaje

El español David Antón , del Atleti pero un chaval muy majo, a punto de hacer historia .

Segundo clasificado a falta de dos rondas en el torneo abierto más fuerte de la historia . FIDE chess.com isla de man
El ganador se clasificará para el torneo de candidatos .
Como Caruana ya está clasificado y Carlsen es el campeón del mundo , si estos acaban en lo más alto de la tabla se clasificaría el tercero.

Hoy juega con negras contra el propio Caruana , si sale vivo y por los desempates le podrían bastar unas tablas en la última ronda .

Sería un éxito sin precedentes en el ajedrez español.
https://iominternationalchess.com/
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