Madri_dista escribió: ↑Lun Nov 17, 2025 6:34 pm
Buenas, madridistas.
Quiero compartir con vosotros mi culebrón sentimental pastelero, porque lo vivido con una chica de una pastelería ha tenido más giros que un partido clave del Madrid.
Al principio todo fue muy cercano: era superamable, me llamaba “cariño”, hablábamos de nuestra edad (ella decía que aparentaba menos; en realidad le saco más de 10 años), e incluso me enseñó a limpiar una caja de producto… un trato bastante especial.
Un día le digo que su nombre es precioso. Ella reacciona muy bien, me cuenta de dónde viene, le hablo de mí, entramos en tema de cumpleaños y signos del zodiaco. Cuando le dije que la felicitaría, fue cálida. Más tarde, al felicitarla de verdad, volvió a serlo, y me dijo que también se alegraba de verme. Fue un momento muy bonito.
Otro detalle que me quedó grabado: le dije que le fuera leve la jornada, y me contestó algo así como “que te vaya todo muy bien / que pases un buen día”. No fue un mensaje que me hiciera reír, pero sí me pareció amable y neutral, y me gustó más que cuando valoró mi memoria.
Luego empezó lo complicado: me soltó un “pues lo pone en la caja” cuando pregunté algo, sonrió más a un hombre mayor que entró, y cuando sus compañeras dijeron mi nombre, ella reaccionó con total neutralidad… un “gol fantasma”, por decirlo de algún modo.
Además, recuerdo que una de sus compañeras bromeó con que la habían echado. A mí me molestó, lo comenté, y al final terminé siendo yo el que quedó mal. Ella y otra compañera defendieron después que solo era “humor negro”. Esa escena me dejó bastante tocado y me obsesioné con sus gestos.
Al final he decidido darme un respiro: dejar de ir por un tiempo, no para cerrarlo todo sino para pensar y calmarme. No tengo claro si algún día volveré, pero de momento mi “VAR sentimental” está pausado.
Aun así, me quedo con lo positivo: por primera vez dije a una chica que tenía un nombre precioso… y para mí eso fue un golazo emocional.
PD: Esta historia con la pastelería ha sido todo un partido: momentos brillantes, fallos, sorpresas —y aún no sé cómo va a terminar.