Raúl no volverá más a la selección
Luis ha prescindido de Raúl en los últimos 11 partidos... y seguirá haciéndolo mientras sea el seleccionador...
Raúl no volverá a vestir los colores de España, al menos mientras Luis Aragonés dirija a la selección. El técnico de Hortaleza, que lleva un año entero prescindiendo de Raúl, dejó claro a todos con sus actos, en su convocatoria para el trascendental choque ante Dinamarca, que prefiere cualquier otra opción a la del madridista y que, a pesar de la cruzada mediática en favor del futbolista, no piensa rectificar.
El sábado, la lesión de Villa había abierto una puerta a Luis para recuperar a Raúl para la selección. Sin embargo, el técnico –como ya casi todos suponían– obvió al madridista y decidió llevarse al españolista Raúl Tamudo. Esa es la respuesta final del seleccionador al debate ‘Raúl sí, Raúl no’: Raúl ya no cuenta para su equipo.
Raúl jugó su último encuentro en Belfast, en el descalabro que España sufrió ante Irlanda del Norte el 6 de septiembre del 2006. Un mes después, la selección debía jugar en Suecia un partido que se antojaba vital, sobre todo tras esa derrota en el Windsor Park norirlandés... y en la convocatoria de Luis faltó por sorpresa Raúl, lo que provocó ríos de tinta que no han dejado de fluir desde entonces.
Hay que tener en cuenta que, desde su debut en octubre de 1996, a los 19 años, Raúl había estado siempre –salvo lesión– en las convocatorias de España: fue indiscutible con Clemente, lo fue con Camacho, con Sáez y también lo había sido con Luis. Era el inamovible capitán desde el 2002 y se hallaba ya a sólo 24 partidos de igualar el récord de internacionalidades de Andoni Zubizarreta.
Para justificar su ausencia, Luis siempre se ha referido al estado de forma del jugador –“cuando esté bien volverá”, “hay otros en mejor forma”, “llamo a los mejores”, ha ido diciendo en estos meses– pero en realidad los motivos son extradeportivos y se incubaron en el Mundial de Alemania y explotaron en Belfast. En el Mundial, Raúl ‘ninguneó’ a Luis cuando éste le exigió compromiso con el grupo aunque no fuera titular. Meses más tarde, cuando antes de jugar ante Irlanda del Norte Raúl le presentó a Luis un memorial de quejas en su papel de capitán –menos horas de entrenamiento, más horas libres, modificaciones tácticas–, el técnico ‘tachó’ mentalmente su nombre.
Aprovechando la debacle de Belfast y la coartada que suponía el mal momento deportivo del jugador, criticado por muchos de los mismos que ahora le ensalzan, decidió prescindir de él para siempre. Ha pasado un año y el seleccionador ha mantenido su postura, sin que la presión sobre él –ejercida especialmente por parte de los medios de la capital– haya hecho cambiar su opinión. Sin duda, el estado de forma del jugador blanco es el mejor de los dos últimos años, pero eso no va a convencer a Luis porque tiene otros razones para dejarle fuera de la convocatoria.