Al margen del quilombo con Vinicius, con la llegada de Carreras, se confirma una vez más que Pérez Rodríguez es la clase de presidente REACTIVO antes que PROACTIVO.
Basta con ver los últimos movimientos de mercado luego de las últimas temporadas que terminaron mal:
- Al final del nadaplete 18/19, Pérez se vuelve loco y trae por casi 200 millones a Hazard y a Jovic, además de gastar durante esa misma ventana otros cerca a 200 millones entre Militao, Mendy, Rodrygo y Reinier.
- Después del nadaplete 20/21 y con la inminente salida de Ramos, hizo lo imposible por traer a Alaba con un contrato altísimo impagable para el Bayern. Además, como lo de Mbappe no se pudo dar, se trajo a Camavinga del Rennes.
- Al final de la temporada 22/23 donde se hizo una muy mala Liga y en Champions el City nos goleó, a la semana de haber perdido 4-0, Pérez ya había enviado a uno de sus lacayos a negociar el traspaso de Bellingham, además de apresurar la contratación de Guler para que no se lo lleve el Barcelona, y finalmente traer a Joselu ante la enésima negativa de Mbappe y el PSG.
- Ahora último, luego del fracaso absoluto de la temporada regular, de una sola movida trae a Arnold, Huijsen y Mastantuono. Y después del fracaso complementario del Mundial de Clubes, no dura ni una semana en traerse a Carreras y a saber a quiénes más.
Incluso si vamos más atrás, vemos que cada vez que al Madrid le va para el ojete en una temporada, Pérez no dura ni un mes en abrir la billetera en una sola ventana:
Yo, mientras no traiga Konaté (del que se ha hablado) me parecen bien los fichajes de Huijsen, Franco y Carreras. Traer a Konaté sería no haber aprendido absolutamente nada de los errores del pasado.