Mourinho, la antítesis del Real Madrid
José Mourinho, el entrenador alienígena, es el título del libro que sobre el técnico portugués escribió el periodista italiano Sandro Modeo.
Un interesante texto que profundiza sobre temas de metodología del entrenamiento, conceptos científicos del comportamiento humano y hasta definiciones filosóficas de la conducción grupal.
Amén de algunos eventos personales del personaje, considerados preponderantes por el autor, en la construcción del tipo de liderazgo que ejerce el buen técnico luso.
José Mourinho es un gran técnico de fútbol, es un transmisor de mensajes ganadores, es capaz de dinamizar el talento de sus jugadores y enfocarlos al triunfo. Está relacionado con la victoria, la conoce, la tutea. No hay dudas, es de los técnicos más exitosos del último tiempo.
Pero no es alienígena, y no es, como el mismo se autoproclama, The Especial One. Pero en el Real Madrid lo creyeron. En tiempos de “hambre atrasada de gloria”, Florentino Pérez contrató y le dio todo el poder a Mourinho. Él representaba el éxito por antonomasia. Él garantizaba la victoria, el resultado.
No importaba cómo, pero lo alcanzaba. Con él conseguirían la tan anhelada décima Champions —desde 2002 no lo logran— y desmontarían ese idilio mundial con el estilo y el éxito del Barcelona, su archirrival que enamoraba el gusto del hincha y gobernaba las estadísticas de las tablas.
Mourinho era la promesa del fin de ese vergonzante sometimiento de su ‘enemigo’ y de levantar ese evasivo trofeo que históricamente fue muchas veces de él. Nueve veces, el que más. Así que a partir de su llegada al club blanco, el Real Madrid se convirtió en Mourinho. Se hizo todo lo que ordenó él.
Se comportó como se mal comporta él. Se discrepó como pelea él. Se desacordó del rival como irrespeta él. Se ultrajaron valores, ídolos, jugadores, colaboradores, porque él lo consideró necesario en nombre del inaplazable objetivo.
Pero después de tres años con Mourinho al frente, Real Madrid alcanzó un solo título importante: la liga 2011-2012. Y, lo más significativo y doloroso, después de tres años el mejor club del siglo XX, con Mourinho, y por él, ha conseguido que aquella admiración y reconocimiento que una inmensa mayoría de los seguidores del fútbol, hinchas y no hinchas, profesaban —profesábamos— por el estilo, la clase dentro y fuera del campo y el donaire que identificaban a este mítico equipo, se transformara en rechazo, antipatía y desilusión.
Cuando individualiza en su nombre el fracaso en esta temporada, es la declaración velada de su convicción de que él es el que gana. He ahí su tragedia: No hay peor enemigo de los triunfadores que su ego; que su poder los vuelva arrogantes; que la prepotencia los lidere.
Eso le ha pasado a Mourinho. Y sus miserias arrastraron al Madrid.
Por Javier Castell López
http://www.elheraldo.co/deportes/mourin ... rid-110868
Lo importante, es que se termino el regimen del maligno ... y los madridistas trabajaremos para recuperar la grandeza de este club, que el Real Madrid vuelva a ser respetado y querido por todo el mundo, no lo que deja ahora Mourinho.
Gorki, David y yo lo dijimos al comienzo... tener cuidado de no empeñar la historia de este club por una obsesión loca de ganar al Farca cualquier partido, que es más importante lo que representamos que cualquier partido de Liga o de Copa que se le pueda ganar al Farca. Al final ellos son campeones de España y nosotros tenemos la peor imagen institucional en muchas décadas.