Yo creo que ahora mismo la guerra está en la prensa; el Real está fuera.
Un diario publica, pregunta y se responde. No tiene ya 'juego' con el club y se limita a burdos titulares, estúpidas encuestas y absurdas columnas de opinión. Y eso tendremos siempre, como tuvimos cuando Raúl no iba a la selección y demás.
Lo que hay que hacer es no seguirles el juego porque al final lo asimilarán y se cansarán. Es lo peor que hizo Mou el año pasado y a buen seguro hoy se echan de menos sus 'perlas' que tanto juego daban y que hoy en día no existen.
Por otro lado, siempre hemos dicho que Casillas apenas, para mi gusto, ha evolucionado de cuando era un chaval y sigue con los mismo errores que no se molesta en atender. Muchas veces me he cuestionado su labor en los entrenamientos y creo que ahora que estaba en lo más alto le ha acabado pasando factura. Pudo haber sido mucho mejor y no terminar así.
Añadir también que la rotación de los porteros en los equipos, tipo Casillas y César o más recientemente en el Valencia Guaita y Alves, me ha parecido una chorrada. Hay que mojarse por uno.
_Jesus_ escribió:Raúl González, exfutbolista del Real Madrid que será homenajeado mañana en el Trofeo Santiago Bernabéu, afirmó hoy que ve al actual capitán madridista, Iker Casillas, "con ganas de seguir peleando" y "continuar" en el club.
"Veo a Iker muy bien. Es un gran profesional, lo ha demostrado en todos los años que lleva jugando, defendiendo al Real Madrid y la selección. Va a seguir trabajando fuerte y duro, con ganas de seguir ayudando a su equipo y la selección española", afirmó en su comparecencia en el estadio madridista.
La situación que sufrió Casillas con José Mourinho la pasada temporada tras su lesión y la suplencia con la que ha comenzado con Carlo Ancelotti en una nueva etapa, no provocan, según Raúl, una situación en la que deba tomar la decisión que él tomó cuando decidió zanjar su etapa en el club.
"Iker tiene 31 años, es portero y está en los mejores años. Le quedan cuatro o cinco de muy buen nivel. Está donde quiere estar, en su casa que es el Real Madrid. Unos meses de suplencia en toda una carrera son insignificantes", opinó.
"Estuve hace tres meses con él en Doha y le vi con ganas de seguir peleando y continuar aquí. Acaba de empezar un nuevo proyecto, con jugadores que han llegado un poco más tarde que otros. La temporada acaba de empezar, es un capitán que va a estar con sus compañeros y ayudar en todo momento", añadió.
Además, descartó Raúl que el cariño de la afición madridista se pueda haber rebajado con el actual capitán. "Todo el madridismo sabe lo que ha dado Casillas y que es un gran profesional. El Real Madrid ahora mismo está empezando un nuevo proyecto y todo el mundo tiene que estar unido, empujar en una misma dirección. Casillas lo hace entrenando y el entrenador toma la mejor decisión. Son 24 jugadores en la primera plantilla, Iker va a seguir trabajando y seguro que va a tener sus oportunidades", sentenció.
Otro golpe en la cara a los anti casillas, cortesía de LA REALIDAD!
Así cómo CR7 DANDO APOYO DIRECTAMENTE A IKER EN LA FINAL CONTRA EL CHELSEA.
Así cómo las palabras del mundo del fútbol denunciando la injusticia en la temporada pasada.
Uno tras otro, pero no serán suficientes ante tal contumacia.
hitzeko escribió:Yo creo que ahora mismo la guerra está en la prensa; el Real está fuera.
Un diario publica, pregunta y se responde. No tiene ya 'juego' con el club y se limita a burdos titulares, estúpidas encuestas y absurdas columnas de opinión. Y eso tendremos siempre, como tuvimos cuando Raúl no iba a la selección y demás.
Lo que hay que hacer es no seguirles el juego porque al final lo asimilarán y se cansarán. Es lo peor que hizo Mou el año pasado y a buen seguro hoy se echan de menos sus 'perlas' que tanto juego daban y que hoy en día no existen.
Por otro lado, siempre hemos dicho que Casillas apenas, para mi gusto, ha evolucionado de cuando era un chaval y sigue con los mismo errores que no se molesta en atender. Muchas veces me he cuestionado su labor en los entrenamientos y creo que ahora que estaba en lo más alto le ha acabado pasando factura. Pudo haber sido mucho mejor y no terminar así.
Añadir también que la rotación de los porteros en los equipos, tipo Casillas y César o más recientemente en el Valencia Guaita y Alves, me ha parecido una chorrada. Hay que mojarse por uno.
Depende, Hitze.
Si como Real entiendes la plantilla, puede; pero si como Real entiendes al madridismo en general la GUERRA es total.
Solo hace falta ver este Foro.
Ojala el circo fuera ocasionado solo por la prensa pero esto no es asi. La temporada pasada a topo solo le hubiera bastado decir que era correcto que fuera suplente y que iba a trabajar para volver a ser titular para parar el circo pero no lo hizo. Sus razones son bastante obvias, el quiere hacer lo que quiera y no le importo el club con tal de obtener lo que el queria, para mantener su imagen no dijo nada mientras sus amigos de la prensa le hacian el trabajo sucio.
Asi que esta temporada ya sabemos a que nos atenemos y viendo que desde la jornada 1 ya pusieron toda la maquinaria en marcha no me quiero imaginar de que sera capaz el topo despues con tal de salirse con la suya.
La primera vez que te engañan estás libre de culpa porque has obrado de buena fe pero si hay una segunda vez que te engaña el mismo la culpabilidad ahora es toda tuya por gilipollas.
El Real Madrid comenzó la temporada con un debate inevitable: Casillas o Diego López. Inevitable por razones estrictamente futbolísticas y por cuestiones ambientales. Horas antes de comenzar el encuentro, el twitter echaba humo con un hastag que decía: Diego López titular. La columna más anticasillista se movilizó en la primera ocasión que encontró: el partido inaugural de Liga. Las razones variaban, pero no diferían demasiado de las que se escuchan en algunos programas alineados con Mourinho hasta las cachas.
Conviene recordar a Mourinho en este punto porque él se encargó de transmitir la peor imagen posible de Casillas: soplón, gordito, vago, inhábil con los pies, ojito derecho del establishment mediático. Nunca, en ningún club y en ninguna circunstancia, un entrenador ha cargado tanto, tan duro y tan públicamente contra uno de sus jugadores. Por desgracia, se lo consintió el presidente, que no hizo nada por controlar la escalada de críticas del entrenador, que actuó con una impunidad intolerable.
Atacado por Mourinho
También conviene situar dónde comenzó el plan de ataque de Mourinho contra el portero, al que había proclamado mejor del mundo en su primera temporada en el Real Madrid. Casillas, que entre otras cosas es capitán de la selección española, decidió comunicarse con Xavi y Puyol después de los infames incidentes que ocurrieron en la Supercopa en agosto de 2011. La violencia latente de aquel partido derivó en la artera agresión de Mourinho a Tito “¿Quién?” Vilanova.
Era imposible continuar con aquella escalada y sus probables consecuencias: violencia en la calle, odio entre jugadores y ruptura de la selección, donde los mismos que participaban en los partidos más desagradables del fútbol español se sentían obligados a defender los colores nacionales. Era imposible mantener aquella esquizofrenia letal. Aquel momento, sin embargo, significó el castigo inmediato de Mourinho a Casillas, el portero que apenas cuatro meses antes había completado una actuación portentosa en la final de Copa en Mestalla. Gran parte de la victoria del Madrid sobre el Barça se debió a tres milagros de su portero.
Mourinho sentó a Casillas en el banquillo en el Trofeo Bernabéu, frente al Galatasaray. Justo ahora, cuando regresa Raúl —otro que recibió un tratamiento miserable por parte de un sector irreductible del madridismo—, se agranda el recuerdo de aquel encuentro. En un acto de deliberada humillación, Mourinho alineó a todo el mundo, incluidos numerosos jugadores del Castilla, pero mantuvo a Casillas en el banco todo el encuentro. Le excluyó hasta de la recogida del trofeo. Fue Sergio Ramos quien tuvo la dignidad y el compañerismo de conducir al capitán del equipo a la ceremonia de entrega.
Ese momento, y ningún otro de los que se han voceado desde Mourinho y sus aledaños mediáticos, fue el que marcó la divisoria de Casillas. El mejor portero del mundo, en palabras anteriores de su entrenador, se convirtió en el objeto de un ataque permanente. Utilizó toda la basura a su disposición para ensuciar el nombre de un jugador que llegó al Real Madrid con nueve años, que dispone de un historial incomparable con su equipo y con la selección, que ha sido aclamado como ningún otro futbolista en el Bernabéu y que, se pongan como se pongan Mourinho y sus acólitos, es el mejor portero que el Real Madrid podría tener.
Iker siempre responde
En su acoso a Iker Casillas, Mourinho utilizó a todos los porteros posibles para desestabilizarle. Pretendió enviar un mensaje cruel, pero cómico: todos eran mejores que Casillas. Desde Adán hasta Jesús pasando por Diego López. Suplente en diciembre frente al Málaga —el Madrid perdió el partido y la Liga, y así lo proclamó Mourinho—, Casillas sólo volvió para sustituir al expulsado Adán. No volvió a jugar un minuto desde su lesión en enero frente al Valencia. Pese a todo, la campaña creció hasta el paroxismo en los meses de suplencia de Casillas. No hubo piedad con él. No le defendió ni su palmarés, ni su madridismo, ni la situación de debilidad que siempre significa la suplencia.
Llegó Diego López, que no es nuevo en el Real Madrid. Un buen portero con una estupenda trayectoria en el Villarreal. No obtuvo el respaldo ni de Michel, ni de Emery, en el Sevilla. Jugó y lo hizo más que bien, aunque sorprendió el número de goles que recibió el Real Madrid en los partidos más importantes de la temporada: tres frente al Galatasaray en Estambul, cuatro frente al Borussia en Dortmund, dos en la final de Copa frente al Atlético en el Bernabéu.
Casillas no es un portero sin fallos y limitaciones, como todos. Pero la portería del Real Madrid le queda como un guante. Es así y lo ha demostrado infinidad de veces. Para defender la meta del Real Madrid no basta con disponer de las condiciones de los grandes porteros. Por el Real Madrid han pasado muchos con extraordinarias trayectorias —Cañizares o Illgner, por ejemplo— que no llegaron a consolidarse totalmente en la portería madridista. Otros, como César o Bizzarri, no alcanzaron el mismo nivel internacional, pero sus longevas carreras hablan de su calidad. Todos ellos, y los buenos porteros que ha procurado el Castilla, no lograron, ni de lejos, acercarse a la trayectoria de Iker Casillas.
Es imposible defender la portería del Real Madrid durante 14 años, y ganar cinco Ligas, dos Copas de Europa y una Copa del Rey, sin unas cualidades excepcionales. Casillas tiene una cualidad imprescindible: hacer sentir a su equipo, a los rivales y a los aficionados que la portería del Madrid no le queda grande. Esa normalidad vale un tesoro en el club más grande del mundo. Casillas rara vez se ha visto superado por un partido o una situación límite, que son las que definen el destino de los mejores equipos del mundo. Todo lo contrario: cuánta mayor es la exigencia, mejor ha respondido. Basta con recordar sus actuaciones en momentos culminantes para el Real Madrid y la selección.
Demasiada carga emocional
La naturalidad de Casillas en la portería no admite comparación. Tampoco su capacidad para olvidar sus fallos. Esa desmemoria ha sido fundamental en su carrera. Casillas no se ha visto superado por errores puntuales. Se ha rehecho y generalmente ha respondido con algún momento prodigioso.
El domingo, frente al Betis, Ancelotti eligió a Diego López, una decisión que invitaba la polémica tanto como la eventual designación de Casillas como titular. El ambiente no ayuda, y tampoco a Diego López, sometido a una carga emocional que él no ha generado. No fue su mejor noche. Midió mal los dos primeros saques de esquina del Betis y pareció afectado por sus errores. Solo así se entiende su extravagante salida ante Jorge Molina en una jugada crítica. Son circunstancias que afectan a cualquier portero, a Diego López y a Casillas, aunque en este caso con el añadido de una extraordinaria, artificial e innecesaria presión ambiental. Son circunstancias que Casillas ha superado mejor que nadie en la historia del Real Madrid.
Es acojonante lo de éste cerdo, la columna anticasillista dice el pedazo de mamón, cómo si fuese parte de la afición la que alinea o sienta a determinados jugadores, estos estómagos agradecidos dan vómitos , paso por encima la obsesión con Mou que destila esta mierda que llaman artículo porque ni merece la pena, ya nos conocemos y sabemos quien es quien, nombra más a Mou que a Casillas en un artículo totalmente infumable.
El circo se monta por las supuestas filtraciones de los "amigos" de Casillas a la prensa pidiendo jugar o irse, nadie monta nada salvo los comepollas juntaletras que quieren que juegue sí o sí, cojo, manco o ciego, esté en forma o no.
Ahora resulta que las cagadas de Casillas con pies y juego aéreo es culpa de anti casillistas y de Mou, debe de ser que Mou abdujo a Casillas y le dijo " a partir de ahora no sabes jugar con los pies ni colocar la barrera, ni mandar a la defensa, ni salir a balones aéreos ni,ni,ni " es imposible decir más gilipolleces en tan poco.
Gentuza cómo éste tipejo es quien divide al madridismo , a ver si nos empezamos a enterar dónde está el enemigo.
rupeni escribió:El Real Madrid comenzó la temporada con un debate inevitable: Casillas o Diego López. Inevitable por razones estrictamente futbolísticas y por cuestiones ambientales. Horas antes de comenzar el encuentro, el twitter echaba humo con un hastag que decía: Diego López titular. La columna más anticasillista se movilizó en la primera ocasión que encontró: el partido inaugural de Liga. Las razones variaban, pero no diferían demasiado de las que se escuchan en algunos programas alineados con Mourinho hasta las cachas.
Conviene recordar a Mourinho en este punto porque él se encargó de transmitir la peor imagen posible de Casillas: soplón, gordito, vago, inhábil con los pies, ojito derecho del establishment mediático. Nunca, en ningún club y en ninguna circunstancia, un entrenador ha cargado tanto, tan duro y tan públicamente contra uno de sus jugadores. Por desgracia, se lo consintió el presidente, que no hizo nada por controlar la escalada de críticas del entrenador, que actuó con una impunidad intolerable.
Atacado por Mourinho
También conviene situar dónde comenzó el plan de ataque de Mourinho contra el portero, al que había proclamado mejor del mundo en su primera temporada en el Real Madrid. Casillas, que entre otras cosas es capitán de la selección española, decidió comunicarse con Xavi y Puyol después de los infames incidentes que ocurrieron en la Supercopa en agosto de 2011. La violencia latente de aquel partido derivó en la artera agresión de Mourinho a Tito “¿Quién?” Vilanova.
Era imposible continuar con aquella escalada y sus probables consecuencias: violencia en la calle, odio entre jugadores y ruptura de la selección, donde los mismos que participaban en los partidos más desagradables del fútbol español se sentían obligados a defender los colores nacionales. Era imposible mantener aquella esquizofrenia letal. Aquel momento, sin embargo, significó el castigo inmediato de Mourinho a Casillas, el portero que apenas cuatro meses antes había completado una actuación portentosa en la final de Copa en Mestalla. Gran parte de la victoria del Madrid sobre el Barça se debió a tres milagros de su portero.
Mourinho sentó a Casillas en el banquillo en el Trofeo Bernabéu, frente al Galatasaray. Justo ahora, cuando regresa Raúl —otro que recibió un tratamiento miserable por parte de un sector irreductible del madridismo—, se agranda el recuerdo de aquel encuentro. En un acto de deliberada humillación, Mourinho alineó a todo el mundo, incluidos numerosos jugadores del Castilla, pero mantuvo a Casillas en el banco todo el encuentro. Le excluyó hasta de la recogida del trofeo. Fue Sergio Ramos quien tuvo la dignidad y el compañerismo de conducir al capitán del equipo a la ceremonia de entrega.
Ese momento, y ningún otro de los que se han voceado desde Mourinho y sus aledaños mediáticos, fue el que marcó la divisoria de Casillas. El mejor portero del mundo, en palabras anteriores de su entrenador, se convirtió en el objeto de un ataque permanente. Utilizó toda la basura a su disposición para ensuciar el nombre de un jugador que llegó al Real Madrid con nueve años, que dispone de un historial incomparable con su equipo y con la selección, que ha sido aclamado como ningún otro futbolista en el Bernabéu y que, se pongan como se pongan Mourinho y sus acólitos, es el mejor portero que el Real Madrid podría tener.
Iker siempre responde
En su acoso a Iker Casillas, Mourinho utilizó a todos los porteros posibles para desestabilizarle. Pretendió enviar un mensaje cruel, pero cómico: todos eran mejores que Casillas. Desde Adán hasta Jesús pasando por Diego López. Suplente en diciembre frente al Málaga —el Madrid perdió el partido y la Liga, y así lo proclamó Mourinho—, Casillas sólo volvió para sustituir al expulsado Adán. No volvió a jugar un minuto desde su lesión en enero frente al Valencia. Pese a todo, la campaña creció hasta el paroxismo en los meses de suplencia de Casillas. No hubo piedad con él. No le defendió ni su palmarés, ni su madridismo, ni la situación de debilidad que siempre significa la suplencia.
Llegó Diego López, que no es nuevo en el Real Madrid. Un buen portero con una estupenda trayectoria en el Villarreal. No obtuvo el respaldo ni de Michel, ni de Emery, en el Sevilla. Jugó y lo hizo más que bien, aunque sorprendió el número de goles que recibió el Real Madrid en los partidos más importantes de la temporada: tres frente al Galatasaray en Estambul, cuatro frente al Borussia en Dortmund, dos en la final de Copa frente al Atlético en el Bernabéu.
Casillas no es un portero sin fallos y limitaciones, como todos. Pero la portería del Real Madrid le queda como un guante. Es así y lo ha demostrado infinidad de veces. Para defender la meta del Real Madrid no basta con disponer de las condiciones de los grandes porteros. Por el Real Madrid han pasado muchos con extraordinarias trayectorias —Cañizares o Illgner, por ejemplo— que no llegaron a consolidarse totalmente en la portería madridista. Otros, como César o Bizzarri, no alcanzaron el mismo nivel internacional, pero sus longevas carreras hablan de su calidad. Todos ellos, y los buenos porteros que ha procurado el Castilla, no lograron, ni de lejos, acercarse a la trayectoria de Iker Casillas.
Es imposible defender la portería del Real Madrid durante 14 años, y ganar cinco Ligas, dos Copas de Europa y una Copa del Rey, sin unas cualidades excepcionales. Casillas tiene una cualidad imprescindible: hacer sentir a su equipo, a los rivales y a los aficionados que la portería del Madrid no le queda grande. Esa normalidad vale un tesoro en el club más grande del mundo. Casillas rara vez se ha visto superado por un partido o una situación límite, que son las que definen el destino de los mejores equipos del mundo. Todo lo contrario: cuánta mayor es la exigencia, mejor ha respondido. Basta con recordar sus actuaciones en momentos culminantes para el Real Madrid y la selección.
Demasiada carga emocional
La naturalidad de Casillas en la portería no admite comparación. Tampoco su capacidad para olvidar sus fallos. Esa desmemoria ha sido fundamental en su carrera. Casillas no se ha visto superado por errores puntuales. Se ha rehecho y generalmente ha respondido con algún momento prodigioso.
El domingo, frente al Betis, Ancelotti eligió a Diego López, una decisión que invitaba la polémica tanto como la eventual designación de Casillas como titular. El ambiente no ayuda, y tampoco a Diego López, sometido a una carga emocional que él no ha generado. No fue su mejor noche. Midió mal los dos primeros saques de esquina del Betis y pareció afectado por sus errores. Solo así se entiende su extravagante salida ante Jorge Molina en una jugada crítica. Son circunstancias que afectan a cualquier portero, a Diego López y a Casillas, aunque en este caso con el añadido de una extraordinaria, artificial e innecesaria presión ambiental. Son circunstancias que Casillas ha superado mejor que nadie en la historia del Real Madrid.
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Pues a mi me parece bien de principio a fin...ya ves.
Sí Assvak, como Real me refería a entidad. La afición la dejo fuera porque es para dar de comer aparte. Es lo peor que tiene a día de hoy el Real Madrid; ni jugadores, ni presidente, ni entrenador.
Por eso digo que por mucho que la prensa publique y la afición debata, es algo que va a pasar simplemente porque desde el club cierran filas; todos, y no alimentan estas tonterías. Y eso fue algo que se debió hacer el año pasado.
degas escribió:En mi vida había visto una campaña projugador tan grande, ni siquiera por Raúl.
Es que perderían toda conexión con el vestuario blanco, y esas cenas tan ricas....
Entocnes que no me entero,el año pasado lo sentó el entrenador por mania personal no?y se protestó desde todos los sectores de la sociedad...este año lo sienta el entrenador por decision tecnica..entocnes por que se protesta?pero no era Ancelotti un verdadero entrenador creador de futbol y no un tio nefasto que no sabe de futbol?....