pichelo21 escribió:En mi sofá, viendo el partido en mi pantalla de 50 pulgadas, con mi camiseta de Benzemá puesta y comiendo pipas.
Matizo, la televisión de Pichelo es de 38 pulgadas en lugar de 50, y en lo de "Pichelo21" también ha exagerado.
(Posdata: la camiseta de Benzemá es de los chinos y a la segunda lavada se le fueron las letras y pone ".en.ema")
Y las pipas estaban rancias
Conste que Pichelo es uno de mis foreros favoritos, pero se gasta menos en infraestructuras que Benzemá en gomina. Muy cierto que las pipas estaban rancias, y la cerveza eran "Burgen Pils" del Lidl, que la abrió en el partido contra el aleti y le puso una cucharilla hasta el martes.
Al final van a tener que editar la pregunta del hilo por "¿Donde y como estaba Pichelo en el gol de Benzema ante el Basilea?"
Un saludo, Pichelo, no te nos enojes.
Esa pregunta es innecesaria. Pichelo estaba en su chalé de la sierra, robando las señal del Plus para ver el partido:
Gana la opción del Carrefour y Florentiano ha descubierto que a esa hora el hipermercado estaba cerrado. ¿Dónde os encontrábais verdaderamente cab.....?
DelBosque escribió:Gana la opción del Carrefour y Florentiano ha descubierto que a esa hora el hipermercado estaba cerrado. ¿Dónde os encontrábais verdaderamente cab.....?
Yo estaba dándole su cena al gato, pero cuando escuche que había gol y vi de quien era, corrí a poner el video para capturar para la posteridad ese momento importante de la historia del madridismo.
Yo estaba contemplando una conjunción luna-jupiter-mercurio que se de una vez cada 50 años, pero si llego a saber lo de Benzemá, me espero otros 50, que la conjunción al menos tiene fecha exacta.
Como es lógico estaba admirando el juego y los movimientos del mago Karim pero realmente no recuerdo mucho. Mis pensamientos aún son confusos y mi memoria no consigue hacerme ver con claridad. Ciertamente no se donde me encontraba, ni que hora era, ni si era todavía de día o ya de noche. Solo recuerdo una extraña música de fondo, como guitarras eléctricas desafinadas, además mi visión era extraña y distorsionada: solo veía un balón y un número... EL "9". Una inmensa sensación de euforia me invadía y gritos tal vez de dolor o tal vez de placer llenaban mi cabeza haciéndose solo distinguible tres fonemas: "¡GOL!"