No me agradó el grito adolescente en la gala del Balón de Oro. Tampoco me gustó el forcejeo para zafarse del agarrón del defensa en una jugada anterior al incidente de la cartulina roja. Y, por supuesto, tampoco me gustó la patada de rabia que dio a uno de los defensores que le llevaban agarrado como pareja de la Guardia Civil en una jugada que tenían que haber pitado penal en contra del Córdoba ya que, sin ese agarrón doble, Cristiano podía haber llegado al balón antes que el portero. Los árbitros y linieres de la Liga española son de lo peor del mundo.
Y, mucho menos, tampoco me agradó el gesto de limpiar o sacar brillo al parche del Mundial de Clubes. Feo gesto.
Sin embargo, las cosas hay que ponerlas en su contexto. Llevo más de 30 años viviendo entre Londres y Madrid, y vi a Cristiano debutar en la Premier en 2003 (creo que CR tendría 17 o 18 años). En 2004 recibió su primera tarjeta roja, en 2006 otra, en 2007 otra, en 2008 otra, en 2009 dos, en 2012 otra, en 2013 otra, esta temporada 2014-15 la de Córdoba. Total: 9 rojas en 12 temporadas (5 de ellas en los 6 años que lleva en la Liga).
Cristiano agrega, a la presión ambiental, la presión que él mismo se mete siempre por su autoexigencia. Es un jugador temperamental. Otros, los pecho frío como Messi, que no se exigen nada a sí mismos, ni tienen presión ambiental en contra (ni en el Bernabéu), y que están caminando la mayoría de los partidos, lejos de las zonas calientes, es normal que tengan muchas menos cartulinas rojas. Creo que Suárez tiene menos rojas que Cristiano, pero cada una supone entre 10 partidos y 4 meses de sanción. La primera fue por dar un cabezazo a un árbitro, y la última fue el tercer mordisco en su carrera.
Actualmente hay un juicio mediático (un suma y sigue desde que Cristiano no fichó por el Barça) donde "exigen" que se aplique el artículo 98 (de 4 a 12 partidos), en lugar del artículo 123 (1 a 3 partidos) aplicable según el acta arbitral. Desde Barcelona se está criminalizando a Cristiano Ronaldo, con la desvergüenza de considerar a Cristiano peor que Luis Suárez. Es la consecuencia de la esquizofrenia paranoide del que se cree el pueblo elegido por Yahvé, el pueblo culé, con un Messias que multiplica los panes y los peces, pero solo para él, sin Hacienda, y un nuevo profeta, Moisésuarez, que separará las aguas del Mediterráneo a dentelladas.
Dicho esto, tanto a Cristiano persona como a Cristiano jugador, a la par que al Real Madrid, les conviene que Cristiano deje la Liga española en julio. El Real Madrid se ha estado resistiendo a las presiones del representante de CR y de un equipo de la Premier League, pero parece ser que varios miembros de la Junta Directiva están intentando convencer a don Florentino que su venta es fundamental, no para el Club, sino para Cristiano como persona. Un país como España, con un índice de madridismo en 2013 del 34% y un índice de antimadridismo del 55% - el resto, un 11%, es neutral - (
http://futbol.as.com/futbol/2013/07/03/ ... 61968.html), en 2014 del 38% de madridistas y 45% de antimadridistas - 17% neutral - (
http://www.jotdown.es/2014/09/mapa-de-l ... l-espanol/) (
http://www.jotdown.es/2014/07/la-relaci ... ien-votas/), es un país donde Cristiano es mirado con lupa, minimizando sus virtudes y magnificando sus defectos.
¿Qué ventajas le reporta la Liga española a Cristiano? Ninguna, salvo estar en el Mejor Club del Mundo del Siglo XX. ¿Qué ventajas le reporta la otra gran liga europea (inglesa)? Al menos dos:
respeto y
reconocimiento.
La crucifixión a la que ha sido sometido Cristiano en Córdoba, donde aficionados indignados que manifestaban llevar 50 años esperando ver al Real Madrid en su ciudad, y haber esperado en colas de más de 4 horas para comprar las entradas, no se corresponden con los siguientes hechos (falta de
respeto y, en lugar de
reconocimiento, desprecio) que se produjeron desde el primer minuto de partido:
- gritos de mofa ("¡Uuuuuuuuuuuuuuuuuuh!") mayoritarios cada vez que tenía la pelota Cristiano
- cánticos despectivos ("¡Balón de Playa, Cristiano, Balón de Playa!") también mayoritarios contra Cristiano, mucho antes del incidente que le supuso la cartulina roja
Si a eso le sumamos las provocaciones de algunos jugadores, los agarrones para que no pudiese jugar, el cóctel Molotov estaba asegurado.
Estas faltas de
respeto y de
reconocimiento, reiteradas durante seis años, que Cristiano sufre en casi todas las canchas de España, han supuesto que el incidente de Córdoba sea la gota que desborda el vaso.
Como madridista sentiré que Cristiano se vaya en julio, pero lo entiendo. Como persona, me parece admirable que haya aguantado tanto tiempo la reiteración en la falta de respeto que ha sufrido este jugador. Te deseo buena suerte en la Premier, que el
respeto y el
reconocimiento siempre lo has tenido allí. Hasta siempre, Cristiano Ronaldo.