No pondría en la misma balanza a Casemiro que a Tchouameni, que cuando ha estado fuera, otros han ocupado su hueco y el equipo ha seguido ganando, que no tiene ni una cuarta parte de los títulos que Casemiro ni su trascendencia en el campo.
No los juzgo desde el forofismo actual con los jugadores, solo he opinado que no entiendo muy bien el papel de este jugador en el campo, incluso intentando entender su papel como mediocentro destructor estilo Makelele o más estético tipo Redondo. En ninguno de esos perfiles me parece que destaque. Lo asemejo más al mediocentro estilo Khedira, que también resultaba ser un fenómeno porque jugaba con Alemania y que también ganó un mundial pero que luego el día que se fue nadie lo echó de menos. Si para que un jugador guste hay que llegar al los entrenadores sabrán, es porque algo no cuadra.