Yo al FIFA le veo una infinidad de defectos y denominarlo "simulador" de futbol seria una burrada. Son errores enormes y si lo juego es porque los amigos lo compran de forma religiosa y lo siguen jugando. Me regalaron en navidad el FIFA 15 de PS3 y veo los mismos defectos de siempre:Marciano escribió:Dios mio, puedes enfrentarte al Córdoba en legendario y juegan como el Barcelona de Pep. Todos mis encuentros termino con 40% o menos de posesión, los gane o pierda.Jim_89 escribió:de fùtbol me gusta màs el Pro Evolution 2015, pese a que no cuenta con algunas ligas y los nombres de algunos equipos es falso (no asì las plantillas ) me gusta lo exigente que es y en los niveles màs altos de dificultad es una autèntica pesadilla.
1) El balon vuela como un globo aerostatico
2) Siempre hay una manera mas facil de meter goles por lo que muchos goles son repetidos (es muy facil meter goles en tiros de esquina), asi como ver marcadores muy abultados.
3) La IA es demasiado estupida y no han corregido muchos errores de la misma, como el clasico en el que lanzas un pase que por alguna razon no llega con la fuerza sufiente, tu jugador se queda a un metro del mismo contemplandolo sin hacer ningun esfuerzo por tomarlo.
5) Por alguna razon a veces me fallan los pases, los siento peor que en versiones anteriores.
4) El peor de todos, y seguramente aquellos que lo llevan jugando un tiempo lo habran sentido, el famoso SCRIPTING que consiste en el videojuego manipula el partido a su antojo en muchas ocasiones para favorecer a un equipo... consecuencias? los jugadores de tu equipo de repente se vuelven retrasados mentales y dejan unos huecos enormes en defensa y se ponen realmente muy torpes para hacer cosas sencillas como recibir un balon; los jugadores del equipo contrario siempre tienen el balon, todos los rebotes les favorecen, les marcan faltas a favor, corners, etc; muchos goles en el ultimo minuto, etc, etc.
Ahi lo tengo arrumbado el dichoso juego, si no fuera porque me lo regalaron en navidad ya lo hubiera vendido sin siquiera sacarlo del empaque, o al menos regalarlo.