eltiolavara escribió:Apostata escribió:Yo no digo que no haya que hacer algún cambio en la plantilla. De hecho a mí los fichajes de este año me han parecido pobres y he echado de menos alguna salida. Lo que digo es que hacerse con un vestuario forma parte del trabajo del entrenador, y cada vez que oigo decir que la culpa es de los futbolistas me recuerda a esos profesores que se quejan de lo difícil que es tratar con críos maleducados e insoportables. Pero alma de cántaro, ¿en que te creías tu que consistía ese trabajo cuando decidiste ser profesor, en educar a muebles?
Pues en el fútbol sucede lo mismo, ser entrenador consiste en conseguir sacar lo mejor de un grupo compuesto por niñatos multimillonarios y envanecidos. Y pensar que los del Real Madrid son diferentes es ridículo, porque el Madrid no hace un casting para traer a los más insoportables, cada uno viene de un sitio diferente y es como es. ¿Qué denominador común hay en un galés, un portugués, un brasileño, un francés, un malagueño o un colombiano para pensar que hemos juntado a los peores?
Manejar el Bayern, el Barcelona, el PSG o el Manu, será igual de complicado que manejar el Madrid. Es lo que tiene cuando quieres juntar a los mejores talentos del mundo. Y por eso se paga lo que se le paga a un entrenador de élite. Si no te haces con ellos, pues dedícate a otra cosa o vete a entrenar un Segunda B lleno de futbolistas modestos con miedo a perder el empleo.
Por eso,como en ese trato los entrenadores lo tienen muy difícil ahí tiene que salir el presidente a dejar las cosas claras y si no lo hace,haciéndoles creer a los jugadores con mas poder todavía pues muy mal por Florentino en ese aspecto,tanto ahora como hace tiempo.
Ni a Cristiano, ni a Messi, ni a Robben, ni al Kun, ni a Ibrahimovic, ni a la madre que los parió a todos juntos los llama un presidente al orden, y cuanto antes lo aceptéis, antes sabréis a que coño estamos jugando.
En el fútbol moderno un jugador no es un empleado que trabaja para una empresa, es una empresa en si mismo que presta servicios para un consorcio de empresas llamado Club de Fútbol. Cuanto antes entendáis que el entrenador entra como un paria desgraciado en mitad del vestuario, antes os quitaréis de la cabeza esa idea arcaica del entrenador severo que pone a cada uno en su sitio.
Un entrenador es, además de un técnico, un negociador. Un tipo que gestiona egos y los encaja de la mejor manera posible en el vestuario y en el campo. Cualquier entrenador de cualquier equipo de fútbol de la élite pelea a diario con los intereses particulares de los futbolistas y de sus agentes. Por ejemplo, aquí hablamos a diario de que por qué Cristiano tira faltas, como si hubiese una manera posible de decirle que no las tire.
¿Qué todo esto da mucho asco? Bienvenidos al Mundo del Fútbol. Hace muchos años que los centrales no llevan pañuelos en la cabeza. Esto va casi todo de Marketing, pero no sólo en los clubs, si no en los jugadores que manejan sus propios intereses personales por encima de los del propio club, y no estás dispuesto a permitirlo, pues contrata a Kiko Ratón y a Jeremías Panceta.