Andaleche escribió:Apostata escribió:Beckam no era un crack, pero para titular si daba. Su comportamiento en el Madrid fue profesional y honesto y su rendimiento fue bueno si no nos empeñamos en medirlo de acuerdo a la atención mediática y las cantidades económicas que movía, porque está claro que eso se debía a circunstancias extradeportivas que nunca estuvieron relacionadas con su calidad y su rendimiento.
Por decirlo de otra manera, si Beckham hubiera sido feíto y su balance de costes e ingresos hubiese sido el de un jugador de clase media, lo habríamos considerado un buen fichaje. Pero como era bellíiiisimo, y su imagen nos reportaba buenos ingresos, lo consideramos un fiasco.
En profesionalidad, James no le llega ni a la suela.
Estoy relativamente de acuerdo. Era un jugador que no era el crack que nos vendían en los medios (a quién me recuerda eso) pero era muy profesional y ponía los balones como nadie.
Yo no lo considero un fiasco porque cosas sí nos dio, pero el problema con él fue que no era para tanto como lo ponían y por el desequilibrio que se generó en el centro del campo por tener que meterle como fuera, no porque fuera guapo o feo. Es poco más o menos el problema que veo en James siendo éste algo menos... hermoso.
Pero el problema de ese equipo no era meter a Beckham. Beckham era suficientemente bueno para entrar en el equipo por si sólo. Es cierto que su solapamiento con Figo era complicado y a veces el portugué acababa desplazado hacia el centro, pero Figo también venía ya de bajada y no había muchos futbolistas en el mundo mejores que Beckham para ocupar esa banda derecha. Cuando finalmente se repartieron ambas bandas entre Robinho y Beckham, la cosa pintaba muy bien sobre el papel.
Pero es que el problema no era ese. El problema era la pérdida de rumbo del vestuario. Sin Del Bosque aquello se desmadró. En vez e un equipo, éramos una banda al rededor de un exfutbolista como el Obeso Nazario que cumplía el expediente con dos carreras por partido. Clanes en el vestuario, entrenadores que entraban por una puerta y salían por otro, la vieja guardia en decadencia o lesionada... curiósamente, Beckham es de los jugadores que recuerdo con más dignidad en aquella feria. Y sin ser un supercrack, nos sacó de muchos apuros con sus faltas y sus centros desde la derecha.
A mí, desde luego, me dejó un buen recuerdo el inglés. Si algunos que tenían más calidad que él hubiesen tenido la misma honestidas y la misma decencia, otro gallo nos habría cantado.