El abisinio escribió:Creo que un criminal en la calle es un mal menor si lo comparamos con un inocente en la silla eléctrica.
Desde luego, de hecho, la silla eléctrica es la mayor manifestación de impotencia de un sistema judicial. Lo he dicho antes: "como no puedo garantizar vuestra seguridad os ofrezco a cambio un espectáculo de venganza para calmar vuestra ira". ¿Pero quién está hablando de silla eléctrica? Estamos hablando de como evitar errores judiciales en todos los procesos, no sólo en los referentes a agresiones sexuales o violencia de género.
Mira, hay un hecho que es incontrovertible, en España las mujeres cometen muchos menos delitos que los hombres. La tasa de mujeres en prisión no llega al 8%, y eso que es la más alta de Europa. Con una proporción de casi 12 hombres condenados por cada mujer condenada, es lógico que haya bastantes más errores judiciales con varones que con feminas, pero en proporción hay los mismos, porque es el mismo sistema judicial con los mismos fallos para unos y para otras. Que se lo pregunten a Dolores Vázquez.
A mí lo que me llama la atención es ver a determinados varones altamente preocupados porque se vaya a cometer con ellos un error judicial por agresión sexual o por violencia de género. La mayoría de la población reclusa en España está por delitos contra la salud ¿no os preocupa que os enchironen equivocadamente por tráfico de drogas, o por estafa, o por robo con fuerza?
Osea, el miedo es de lo más peregrino y específico: "joder, es que te coge una mujer, te pone una denuncia por violación, el juez le hace caso y acabas en la cárcel". Y claro, luego para reforzar la tesis, se googlea uno "errores judiciales por violación", se cogen un par de casos realmente lamentables y hala, ya está montada la teoría de la conspiración: en España las mujeres se dedican a poner denuncias falsas de violación, los inocentes acaban en la cárcel y a ellas no les pasa nada. Con dos cojones, rebelémonos contra esta injusticia.
Pues hombre, en España se produce una denuncia de violación cada 8 horas, y teniendo en cuenta que la mayoría no se denuncian por vergüenza, por miedo o porque se producen dentro del entorno familiar, eso es sólo la punta del iceberg. Cuando se producen estas denuncias hay unos protocolos que incluyen la verificación forense de que la violación se ha producido, y es difícil, pero muy muy difícil engañar a un médico diciendo que te han violado si no ha sido así, a parte de que si te pillan, como he dicho antes, te juegas ser tú la que acabes en la cárcel.
En un contexto así, suena un poco raro que la principal preocupación de uno sobre este tema sea algo tan poco frecuente como que a una mujer le dé por denunciarte por violación sin haberle hecho nada y que el juez se equivoque y te enchirone. Hombre, ya puestos, tened cuidado, no vaya a ser que vuestro vecino esconda la cocaína en vuestro trastero.