Apostata escribió:Andaleche escribió:Apostata escribió:Somos lo que somos por nosotros mismos, por lo que hicimos y por lo que seguiremos haciendo, y para ello es imprescindible mirar hacia dentro.
Yo no he hecho nada, no he jugado en el Madrid ni nada de eso. Sólo soy un aficionado cualquiera que ve los partidos por la tele así que no tengo mérito ninguno. Vosotros tampoco (y los del Farsa menos aún).
Nunca he entendido esas discusiones entre aficionados de equipos distintos que se toman el mérito de otros como algo personal y los fallos de los jugadores de un equipo, que terminen en su derrota, como si Paco de Albacete que comenta el partido con su vecino Andrés tuviera algo que ver y provoca su mofa.
Pues los que no habéis hecho nada, ya es hora de que empecéis.
Si dejamos de lado lo emocional y vamos a lo práctico, desde los 10 años que empecé a ir al fútbol, yo ya me habré dejado en el Madrid lo suficiente como para pagar una semana del salario de Bale, y como el que paga soy yo, elijo haber pagado la semana en la que le metió la chilena al Liverpool, así que fijaos si he hecho
Ahora en serio, ¿cómo que los aficionados no hacemos nada? Un club de futbol sin su afición no tiene sentido ni viabilidad, o por lo menos no lo tiene un club como el Real Madrid.
El Real Madrid lo levantaron gente como nosotros que iban todas semanas a ver a cuatro pelagatos que no ganaban un carajo, y cuando empezó a crecer, lo empezó a sostener cada vez más y más gente.
Es cierto que lo que cada uno hacemos individualmente por el Madrid es una gota de agua en un océano, pero todas esas gotas de agua en su conjunto forman el océano. Aquí no viene nadie a jugar por la cara, aquí todo se paga con el dinero que aportamos o con el caché publicitario que genera nuestra atención mediática.
Si los adicionados nos vamos, el Madrid desaparece. Y es un error que entendamos que el club pertenece a los directivos o a los futbolistas. Algunos de ellos claro que aman al Madrid, más incluso que nosotros porque han vivido inmersos en él durante años, a veces durante toda su vida. Pero no se nos puede olvidar nunca que el futbolista es ante todo un profesional y ,por tanto, un asalariado. Ni Di Stefano, ni Raúl, ni Cristiano habrían jugado en el Madrid si no hubiese mediado una importante suma de dinero. Nosotros, sin embargo, no sólo no cobramos, si no que en muchos casos invertimos en esta pasión más de lo que dicta el sentido común.
No lo dudéis nunca, para lo bueno y para lo malo, nosotros somos el Real Madrid Club de Fútbol.