JudeBell escribió: ↑Dom May 26, 2024 9:58 am
Apostata escribió: ↑Dom May 26, 2024 8:11 am
Vendemos a Chouamení y a Rodrygo, porque nos caen muchísimo mejor Camavinga y Brahím, y esto es como los inmortales, que sólo puede quedar uno por puesto: un pivote y un extremo derecha, y si el año que viene se lesionan, los sancionan o pasan por un periodo de bajo rendimiento, ponemos a Valverde de mediocentro defensivo y devolvemos a Lucas Vázquez al extremo derecho.
Así que ya tenemos fuera a Chuamení, Rodrygo y Kroos, en una plantilla que tampoco era muy larga. Y para compensarlo traemos a otro centrocampista random, que tiene que funcionar sí o sí desde el primer día. Esto es lo que en mi pueblo se llama hacer un pan como unas tortas.
Yo lo de Rodrygo lo entendería porque la verdad es que si le quieres dar algo de oportunidades a Guler y Endrick tienen que salir de los minutos de Rodrygo en gran parte, y además en ataque hay overbooking.
Lo de Tchouameni aquí lo quieren vender a algunos para traer a algún viejo, a uno peor o a uno que no juega de pivote defensivo. Y luego cuando no esté Camavinga ya te obliga a hacer experimentos.
No caigamos en los errores de siempre que nos han llevado a pasarnos 20 años sin ganar 2 ligas seguidas, la plantilla tiene que estar compensada y Tchouameni algo tendrá para ser titular aunque a muchos no os guste.
Yo es que ni quiero ni dejo de querer eso de dar oportunidades a Güler o a Endrick. Hace dos años no sabía ni quienes eran Güler o Endrick y hace cuatro o cinco no tenía ni idea de quien era Rodrygo, igual que ahora no tengo ni idea de quienes serán los próximos dos o tres juveniles que llegarán al club con una promesa de proyección extraordinaria debajo del brazo.
Lo que sí se es que la historia de este deporte me ha enseñado de que la cosa no va de ir quitando buenos jugadores de en medio para ver que pasa con los que vienen detrás, eso es un error mayúsculo a tenor de la escasa proporción de promesas que acaban cuajando en un equipo de primera línea como el Madrid. Los jugadores jóvenes tienen que crecer en un ambiente competitivo y hacerse un lugar por méritos propios. Siempre ha sido así, no se echó a Santillana para que jugase Butragueño ni se echó a Butragueño para que jugase Raúl. Por eso cobra tanto un entrenador, para manejar el equilibrio de una plantilla y decidir que es lo mejor para el equipo, no para el jugador.
Yo no digo que Rodrygo sea un jugador para balón de oro, pero a día de hoy, Rodrygo es "el suelo" de nuestra capacidad ofensiva. A partir de ahí, si Brahím o Güler o Endrick lo consiguen mejorar, situaremos el suelo más arriba, pero lo que no vamos a hacer es retirarlo con grave riesgo de acabar suspendidos en el aire.