Gorki84 escribió:El Athletic ha fichado a Saborit un cadete catalán del Español. Se une así a otros de origen nigeriano, camerunés, malí e italiano.
Creo que es el momento de afrontar el debate de cual es la verdadera filosofía del club, y quién puede jugar en él. Para mí pueden jugar todos los chavales que se formen en el fútbol vasco, independientemente de que hayan nacido en las siete calles o en China. Por lo tanto este chaval, si se va a formar en Euskadi, reune todas las condiciones para jugar en el Athletic.
Gracias, Hitz. Me estaba imaginando algo así.hitzeko escribió:No es que no condenasen el atentado, pero no se guardaba el minuto de silencio para evitar posibles altercados con el sector de la afición más radical. Visto lo de hoy en San Mamés, lo mejor hubiese sido que no se hubiese guardado.
No sólo en la Catedral ocurre; el Reyno de Navarra no ha realizado el mencionado minuto por el mismo motivo.
Pero q mucha verguenza.La aficion del athletic no se merece a esos inpresentables.fran_beni escribió:Eso da vergüenza..
Bonita prosa al escribir y querer justificar, pero por desgracia, parece que lo mejor es no hacer nada para que sean protagonistas los radicales, callar y aguantar por dentro, que recrimirles, hacer minutos de silencio y excluirlos si es necesario de la sociedad (traducción: echarlos del estadio a esos socios), ¿quien es mas culpable el que agrede o el que calla ante la agresión?Gorki84 escribió:Los que hemos defendido que el Athletic debe mantener la tradición de no guardar minutos de silencio por personas ajenas al club, pienso que teníamos razón. Mucho se ha criticado esta tradición, pero ayer se vió que para lo único que sirve romperla es para que los radicales del fondo norte sean protagonistas. Hay que recordar, que incluso cuando se guardó para rendir homenaje al presidente Uría o a Telmo Zarra, aprovecharon el silencio para que se oiga su patética voz. Pero la voz que de verdad se oyó ayer en toda Euskadi, fue la de sus ciudadanos en las urnas. De todas formas hay que resaltar también, que las consignas de estos lerdos contra el PNV y contra España, fueron respondidas por los silbidos del resto de San Mamés.