Palabra de Ramón Calderón
José Luis Carazo
Ramón Calderón no dice la verdad ni a su médico. Al presidente de la ‘Casa Blanca’ se le va la fuerza por la boca. Habla más de la cuenta ya sea para presumir de millones logrados en un nuevo contrato con televisión, para anunciar fichajes no cerrados o para prometer cosas aún sabiendo a ciencia cierta que no puede cumplirlas. Vende milongas a cientos, sin importarle que acabará traicionando a todos los socios o aficionados. Prometió los fichajes de Cesc y Kaká como bagaje para ganar las elecciones a la presidencia del Real Madrid y al final tuvo que conformarse únicamente con los cromos de ambos jugadores. Aseguró la continuidad de Fabio Capello y en cuanto le ganó la Liga, lo echó con cajas destempladas.
Dos temporadas después, aseguró a sus parroquianos que tenía un ‘talego’ con 90 millones de euros para fichar a Cristiano Ronaldo y que lo conseguiría por lo civil o lo criminal, aunque el Manchester United no quisiera saber nada del asunto y al final, otra vez, tuvo que resignarse con colgar en su despacho el poster del internacional portugués. Las trolas o los faroles se suceden uno tras otro. Recientemente aseguró que se había cerrado el grifo de los fichajes (ninguneando de esta manera a Bernd Schuster que está pidiendo a gritos refuerzos), pero un servidor está en condiciones de afirmar que si el Madrid pierde la Supercopa de España frente al Valencia este próximo domingo no será un jugador el que llegue, sino dos.
También presume de haber logrado su particular batalla en el pulso que le ha echado Robinho y su representante, Vagner Ribeiro, asegurando que “el brasileño seguirá con nosotros esta temporada” y aún es posible que a partir del 31 de agosto esté entrenando en el Chelsea al lado de Luiz Felipe Scolari. Me cuentan que el manager del jugador se encontraba ayer en Londres intentando cerrar el traspaso por 40 millones de euros. El Chelsea ha ofrecido a Robinho 6 millones, libres de impuestos por cada una de las cinco próximas temporadas, cifra que el Madrid no ha llegado, y la operación puede cerrarse en breve por el club inglés.
Así pues, mucho nos tememos que Ramón Calderón tendrá que hacer mutis por el foro, aunque lo más probable es que si se cierra el traspaso, seguro que saldrá otra vez por peteneras para decir que “este jugador ya no tiene sitio en el Real Madrid”, tal y como aseguró cuando vio que el traspaso de Kaká era inviable.
Ya se lo que muchos dicen... es de sport y esos cules mas que nadie no hablara bien de nuestro equipo.
Pero es que lo que dice no es mas que la verdad, y yo estoy deacuerdo con todo.
Muchos hablan de florentino y otros personajes y como ninguno llegara a pasar como el mejor presidente de la historia, y que mientras el equipo se mantenga en la parte alta no importa lo demás...
... pero que acaso no es posible encontrar a alguien que pueda mantener al equipo en la parte alta de las competiciones, con buena salud economica y que no quiera un protagonismo desembocado???? acaso no tendremos un presidente con esas 3 cualidades?