no se trata de si Casillas y Mou son amigos o enemigos, se trata de ver si unos profesionales, por cierto, muy bien pagados, que están, hasta ahora, en el mejor equipo del mundo, pero que, en los últimos tres años, otro equipo les machaca una y otra vez, se van a esforzar más que los demás para seguir siendo el mejor equipo del año. Y está visto que no, que si hay vacaciones, primero descansarán, comerán polvorones, cantarán villancicos y, si les queda tiempo, pues piensan un poquito en el fútbol. Y eso lo dice un tío que es canterano y capitán del equipo. Así nos va.
Sólo falta que Casillas llame a su amigo Xavi Hernández para decirle los kilos de turrón que se ha comido cada jugador.
En fin, me parece que, con esa actitud, este año no tocamos ningún título.
Me imagino a los jugadores del barca afilando los cuchillos para entrar a degüello y a los del Madrid comiendo turrones.
Está claro, las derrotas con el barca es más por mentalidad de los jugadores que por calidad o sistema. Ya podemos fichar todos los medios centros del mundo, que mientras no cambien la actitud, lo llevamos claro.